Más Información
aridiana.banos@eluniversal.com.mx
Con buenas actuaciones y no con efectos especiales es como la puesta en escena El exorcista conquistó al público que asistió al Teatro Ramiro Jiménez a la función de estreno.
La expectativa por esta obra fue tal que el lobby estaba lleno y pese a que ya no había boletos para esta función, la gente seguía llegando a la taquilla para conseguir una entrada. Entre los invitados que estuvieron presentes se pudo ver a Alejandra Ávalos, Marcos Valdés, Sugey Ábrego, Mimí la ex Flans, Charly López y Germán Ortega.
Eran las 20:30 horas y se había anunciado la segunda llamada, las 655 butacas que componen el aforo del lugar estaban ocupadas y los representantes de los medios ya apostados en sus lugares, listos para registrar lo que sucediera en escena.
El sonido de un trueno fue la señal para que las luces se apagaran y la función diera inicio. Primero aparecieron Cynthia Klitbo y Paola Meixueiro, quienes dan vida a Chris y Regan MacNeil, una madre y su hija que deberán enfrentar a una fuerza sobrenatural que trastocará sus vidas, por lo que deberán recurrir a la ayuda de los sacerdotes Damien Karras (Diego de Erice) y Lankester Merrin (Ricardo Silva), quienes deberán realizar un exorcismo para liberar a la niña del demonio que la atormenta.
Hubo gritos pero también risas, por la tropicalización del texto escrito por William Peter Blat y que fue adaptado al teatro por John Pielmeier, debido al humor involuntario que esto provocó en los momentos más intensos de la historia.
Si bien los efectos especiales que hacían levitar a Regan o mover cosas estuvieron bien realizados, fueron las actuaciones las que llevaron al filo de la butaca a los espectadores, que al final dieron un aplauso al elenco.
“Es un placer presentarles El exorcista, un proyecto inició desde 2012 cuando se presentó por primera vez en Los Ángeles, el texto se fue puliendo hasta que en 2017 quedó como debía y se presentó en Inglaterra, ahora le toca a México”, dijo Eduardo López, el productor.