Después del rotundo éxito que tuvo en las pantallas de Estados Unidos, "Sonido de libertad", película producida por Eduardo Verástegui, ha arrasado en las taquillas mexicanas.
Fue el pasado 31 de agosto cuando la cinta estrenó en más de 2 mil pantallas en todo el país, y en su primer fin de semana logró recaudar más de 59 millones de pesos, según datos de la Canacine.
Esta cifra dejó muy atrás a otros estrenos como "Contrarreloj", con Liam Neeson, que sólo registró 18 millones, o la película mexicana "Viaje todo robado", que se quedo en 6 millones.
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Pero el fenómeno que ha provocado la película que aborda el problema del tráfico infantil se ha extendido a diferentes países latinoamericanos, por ejemplo Colombia, donde, según varios medios locales, ya ha sido vista por más de 300 mil espectadores, convirtiéndose en la más taquillera.
Honduras, Argentina, Nicaragua, Chile, República Dominicana, Bolivia, Venezuela, Ecuador, Costa Rica, Uruguay y Perú, entre otros, son algunas de las naciones en las que también se posicionó como la número uno.
A través de sus redes sociales, el productor, quien además acaba de registrarse como candidato independiente para las próximas elecciones de México, reaccionó a la respuesta que el público latinoamericano ha tenido con su filme: “Hay una palabra que describe todo lo que siente mi corazón en estos momentos, donde nuestra película se encuentra en primer lugar en 17 países, incluyendo mi México lindo y querido. Esa palabra es GRATITUD”, escribió.
La historia sigue a Tim Ballard, un ex Agente de Seguridad Nacional de Estados Unidos, que decide dejar su trabajo para adentrarse en el mundo del tráfico de personas, especialmente el infantil.
Ballard asume la difícil misión de rescatar a una niña, quien resulta ser la hermana de un pequeñito a quien salvó recientemente.
La película es protagonizada por Jim Caviezel, actor que alcanzó la fama tras interpretar a Jesús en "La pasión de Cristo"; además también cuenta con la participación de Verástegui.
La temática tan cruda del filme la ha convertido en tema de conversación desde que salió a la luz en Estados Unidos, el pasado 4 de julio; sin embargo, a su alrededor se ha generado una fuerte polémica pues Verástegui, su productor, declaró abiertamente haber recibido amenazas de muerte tras su proyección.
Por si esto fuera poco Fabian Marta, uno de los inversionistas de la producción, fue detenido hace un par de semanas por los delitos de secuestro infantil, precisamente uno de los problemas que aborda la cinta. Aunque Eduardo se deslindó por completo de los actos cometidos por Marta y aseguró que no tenía ningún tipo de relación con él, las críticas no se hicieron esperar y tacharon al actor y a la película de tener "doble moral".
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