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La trama de la puesta en escena Rumores comienza con un acto violento: un hombre está herido de bala y no se sabe quién le disparó, aún así no es una historia de drama, pero sí de reflexión.
“Vemos un reflejo de la sociedad totalmente actual, por lo que el público puede llegar a sentirse identificado con lo que sucede en escena. Como es una situación que le podría pasar a cualquiera, aquí la pregunta es: ¿tú que harías ante esto? ¿Qué personaje serías? quien le quiere hablar a la policía, el que busca proteger a alguien o el que no quiere saber nada”, señaló el director Emilio Wriedt.
Rumores es una obra del escritor estadounidense Neil Simon, la cual gira en torno a un grupo de parejas que se reúnen para celebrar una fiesta en la casa de uno de sus amigos. Sin embargo, cuando llegan, descubren que el anfitrión ha sido herido y su esposa está desaparecida. A medida que los invitados intentan averiguar qué ha sucedido y cómo manejar la situación, se desencadenan una serie de malentendidos.
Emilio explicó que a pesar de ser una obra de 1988 pero que está muy vigente, porque está muy bien escrita, maneja perfectamente la farsa y la comedia no es ni sexual o vulgar. Y para que la historia siga teniendo sentido, el director explicó que decidió dejar el contexto en el año de 1989, cuando no había celulares o computadoras, los cuales facilitan la comunicación con las personas: así los presonajes tratarán de resolver el misterio sólo con rumores.
Los encargados de contar esta historia en el escenario son Paola Montes de Oca, Lion Ollivier, Paula Zepeda, Ramiro Piñón Manini, Jaime de Lara, Andrea Wriedt, Jhovardy Vences, Ricardo Ripol, Jimena Díaz, Martín Goñi, Vanessa Bravo, Paola Vega, Jaime de la Torre, Ramón Barrenechea, Jonathan Rubén, Bru Uribe y Brandon Granados, actores experimentados que vienen de hacer musicales y que tienen el talento para hacer reír a la gente.
“Cuando hicimos las audiciones les pedimos que nos enseñarán la comedia, que mostraran que podían manejar el humor blanco y que tenían el ritmo para estos textos, porque es lo que le da fuerza a los chistes”.
Pero sobre todo, porque se trata de una comedia de puertas, es decir, los personajes entran y salen de los diversos espacios que recrea la escenografía para permitir que los enredos se den y sean el detonante de la comedia.
Esta puesta en escena, que inició su temporada la noche de ayer en MarkeTeatro, donde permanecerá hasta el 6 de julio; es para adolescentes y adultos, porque hay situaciones donde hay tabaco y alcohol, pero sobre todo, porque el espectador debe tener cierto criterio para entender la historia.