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En la primera escena del video “Todo lo que está pasando me gusta” se ve a Reyli Barba acostado en una cama de hospital, con los ojos cerrados y en un pasillo en ruinas, para después levantarse y caminar hacía un espejo.
Reyli explicó que los ocho años de ausencia del ambiente artístico fue en un principio por necesidad (se rehabilitaba del alcoholismo) y después por el deseo de hacer un gran disco, el cual está lleno de optimismo en los 12 temas que lo componen y que reflejan su estado actual. Prueba de ello es el sencillo “Todo lo que está pasando me gusta”.
“Creo que no hay mejor manera de decirle a la gente ‘Hola, estamos de vuelta, porque lo que está pasando me gusta’, que es como un mantra de optimismo”.
Si hay algo que está disfrutando en este momento, es el encuentro que está teniendo con su público, al que ha visto en tres conciertos que ofreció previos la lanzamiento del sencillo, y en los cuales se dio cuenta que su música no ha sido olvidada al escucharlos cantar sus éxitos.
El cantante comentó que ahora comprende que lo vivido fue necesario para llegar a tener esta nueva perspectiva de vida, porque hubiera sido más sencillo quedarse en el dolor, engañándose pensando que la estaba pasando bien cuando no era así.
“Ahora que puedo vivir sin beber es una maravilla”.
Sus hijos Reyli y Jerónimo fueron fundamentales para su recuperación porque se dio cuenta que tenía que darles un buen ejemplo y ahora lo que quiere es heredarles esa filosofía de vida que recibió de su padre y abuelo y que está encerrada en una frase, la cual tiene escrita todos en los espejos de su casa: Todo lo que está pasando me gusta.
Pero ¿qué es lo que le está gustando a Reyli de esta nueva etapa en su carrera y vida personal?
“Estar sano, estar delgado, estar con mi familia, estar con mi hijo (Reily), estar cerca de mi otro hijo (Jerónimo) a pesar de la distancia y estar bien conmigo, me siento liberado, alegre y agradecido. Sigue para mí una gran vida, porque es lo que estoy eligiendo”.