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Para la cantante francesa Edith Piaf el arte se convirtió en una ventana de escape de los problemas del día a día. La historia de la artista cobrará vida en el Centro Cultural Teatro 1 con el montaje Piaf, voz y delirio.
El texto, escrito por Leonardo Padrón, es protagonizado por la venezolana Mariaca Semprún.
“La tesis de la obra está basada en cómo Piaf utilizó el arte como forma de salvación y el escenario y la música como su escape, su forma de ser feliz”, explica la actriz.
“Ella decía que en el escenario se le olvidaban todos sus problemas. Por un momento el público y ella eran una comunión y todo el mundo olvidaba sus problemas para vivir a través de la música, dejarse llevar por un viaje”, relata.
Con una orquesta en vivo y a través de 18 canciones, entre ellas una de las más conocidas de voz de Piaf, “La vida en rosa”, Semprún retoma pasajes de la francesa como sus problemas con las drogas y de salud.
“La obra arranca con la gran Piaf proclamando que su única forma de vida y su único sentido es cantar”.
Luego de ofrecer más de 120 funciones en países como Venezuela, España, Estados Unidos y México, Semprún comenta que además del trabajo físico y de caracterización que requirió la puesta en escena, uno de los mayores retos fue el de cantar en francés al ser un idioma que no domina.
Además del montaje y, a raíz de la respuesta del público, los temas que interpreta Semprún ya fueron grabados en un disco mismo que, comenta, está preseleccionado para los premios Grammy.
Para Leonardo Padrón se trata de una metáfora sobre las posibilidades de redención que tiene una persona a través del arte.
“Todo el mundo conoce o ha oído la música de Piaf, el reto para mí como escritor fue tratar de ir a los episodios que forjaron su carácter. Su gran herramienta, su gran antídoto fue el arte”, explica.
El montaje producido por Gou Producciones comenzará temporada el próximo 17 de enero.