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Para el director estadounidense Christopher McKay llevar a cabo su nueva película "Renfield" significó un desafío laboral más loco que el de su propio guión. La historia se centra en la vida del asistente personal de Drácula, el vampiro más famoso de la literatura, creado por Bram Stoker.
Después de años de servir a su narcisista jefe, el joven Renfield está dispuesto a ver si hay vida fuera de la sombra del llamado Príncipe de las tinieblas, así lo explica la sinopsis de esta película que estrenará en México el 27 de abril. Pero más allá del reto de contar esta nueva historia, McKay recuerda el difícil inicio de esta producción con un bajo presupuesto.
"Quería filmar las cosas de manera práctica y hacerlo lo más real posible, y eso requiere mucho más tiempo, pero el estudio solo tenía una cierta cantidad de presupuesto que quieren gastar en una película como esta, así que tuve que encontrar una manera de poder improvisar, encontrar un momento en nuestro horario para poder obtener todo lo que quería, pero también hacerlo dentro del presupuesto y del cronograma", cuenta McKay en entrevista con EL UNIVERSAL.
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Con Nicolas Cage y Nicolas Hoult como protagonistas el director estuvo al frente de una cinta que ambicionaba juntar géneros como la comedia, el terror y la acción con un presupuesto de 65 millones de dólares disponibles. "Piratas del Caribe: Navegando en aguas misteriosas" es la película más cara de la historia, con un presupuesto de 410 millones, seguida de "Avengers: Era de Ultrón", que obtuvo un 365 millones de dólares.
Por esta razón llegar a filmar la primera escena fue más especial para el cineasta y lo recuerda como un logro.
"Afortunadamente, tenía un equipo realmente increíble que se preocupaba y estaban allí, como dando un millón por ciento todos los días", señala.
"En el momento en que hicimos la prueba de cámara, cuando Cage y Holt aparecieron completamente maquillados y disfrazados y todos vieron cómo se veían y cómo se iban a ver, creo que a la gente le gustó de inmediato", recuerda. "Fue como que todos dijimos "Ok, estamos en el juego y sabemos qué tipo de película es esta. Esto va a ser muy divertido, vamos a darlo todo, fue el momento en el que cada miembro del equipo realmente dio un paso al frente".
Sobre la participación de Nicolás Cage en lo que es su primera película de acción en vivo por un estudio importante, desde que protagonizó Ghost Rider: Espíritu de Venganza, en 2011, el director destaca su ejemplo como una motivación para otros de seguir poniendo su mayor esfuerzo.
"A Nicolas Cage le encanta estar en el set, le encanta crear personajes y le encanta ser juguetón. Poder trabajar con alguien así es muy inspirador. Y entonces él estaba constantemente creando y dando ideas; estar cerca de ese nivel de alegría fue muy divertido para mí y para el equipo. Todos estamos sentados allí asombrados por este tipo que es una estrella de cine increíble, pero a la vez es tan generoso con el set, con otros actores, con el equipo. Realmente un ser humano único", detalla el director.
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