Es recordado como uno de los actores más emblemáticos del cine de acción y su rostro ha dado vida a personajes ya clásicos del séptimo arte como John Rambo y Rocky Balboa.
Sin embargo, la historia de Sylvester Stallone, que queda plasmada en su nuevo documental "Sly", revela al hombre detrás de esa imagen fuerte e inquebrantable.
La producción de poco más de hora y media, de la plataforma Netflix, ofrece una mirada poco conocida de “Sly”, llena de momentos de reflexión que el hombre de 77 años ha recabado a lo largo de su vida.
"¿Que si tengo arrepentimientos? Claro que tengo, pero eso también es lo que me motiva a superarlos, arreglarlos, y lo hago pintando o escribiendo porque no puedo arreglarlos físicamente. Se ha ido esa maldita cosa llamada tiempo, se ha ido", dice Stallone en los primeros minutos del documental dirigido por Thom Zimmy.
Mientras se prepara para una mudanza, el protagonista de “Halcón” (1987) recuerda su infancia marcada por el rechazo de su padre, Frank Stallone, la ausencia de su madre, Jackie Stallone, y cómo gran parte del tiempo vivió en un internado.
"Básicamente 12 meses al año nunca volvía a casa porque ellos (mis padres) estaban ocupados trabajando. La gente dice: 'oh, tuviste carencias y no te sentiste querido'. Y pienso, 'sí, es verdad', pero tal vez sí me siento querido por el respeto y amor de los extraños", comparte Stallone.
Tomando el rechazo como un incentivo, el joven nacido en Nueva York comenzó a escribir sus propios libretos al no encontrar un espacio para él en Hollywood. Así, en 1976 llegó "Rocky", cinta que escribió, dirigió y protagonizó, aquella que daría inicio a la leyenda del cine, pero que también lo haría vivir la soledad y la caída que puede acompañar al éxito.
"Aprendí que todo pasa (tras el fracaso de varias películas después de 'Rocky'). Sólo resiste, no tengas ataques de ansiedad, no tengas miedo, es parte del juego, eso es lo que hace lo interesante, que le tengas miedo".
A lo largo del documental, que cuenta con testimonios de Quentin Tarantino, Talia Shire y Arnold Schwarzenegger, entre otros, Sylvester, quien también es pintor, va desde su infancia a la época actual, en donde ha tenido un resurgir de su carrera gracias a la franquicia de "Los indestructibles", pero también es sincero al señalar que, por dedicarse a la actuación, muchas veces descuidó su familia: tuvo cinco hijos, uno de ellos fallecido en 2012, y actualmente está casado con Jennifer Flavin.
"Cuando eres joven piensas 'debo llenar la casa de arte, con niños', bueno, ya está llena, los niños ya se mudaron y tú te quedas con este enorme vacío".