Desde el nombre de la banda, Panteón Rococó, hasta un disco titulado Ofrenda y una portada que alude a las fiestas de Día de Muertos en México, con flores de cempasúchil y papel picado, el vínculo del grupo de ska con esta celebración siempre ha tenido una estrecha relación con su carrera.
En el marco del festejo del 1 y 2 de noviembre, días que recuerdan a los files difuntos, los músicos mexicanos comparten cómo les gustaría ser inmortalizada.
“Como banda nos gustaría ser recordada como una que nunca se conformó con lo que tenía, que se atrevió a hacer una gira fuera de nuestra zona de confort, que siempre creyó en la música, que siempre quisimos mucho a nuestro grupo.
“Ese atrevimiento es lo que nos ha mantenido, y cuando tenga que acabar acabará, pero por ahora creo que lo estamos disfrutando y nos seguimos perdiendo el asco como desde el primer día”, describe con humor Darío, el bajista del grupo.
Este año, que repiten la celebración de su concepto Días de Panteón y que festejan hoy y mañana en el Parque Bicentenario, los músicos reflexionan:
“Nosotros creemos que nada es casualidad y que parte de que se decidiera en estos días es una expresión que no pensamos, pero que surge significativamente. Todo es circular, celebraremos los días de Panteón pero no de panteón de un cementerio sino de cómo vivimos nosotros cada día, celebrando, disfrutando”, apunta por su parte Rodrigo Bonilla, el guitarrista.
“Ya es algo que como mexicanos traemos con nosotros, no es necesario que sea Día de Muertos, a lomejor es algo que tenemos tan arraigado que ya ni siquiera lo pensamos y nos llamamos Panteón Rococó”, cuenta Paco Barajas, del trombón.
El grupo considera que estos festejos no forman parte únicamente de una fecha en específico, sino de toda una tradición entre los mexicanos, como una forma de cultura y de vivir con la muerte, de recordar a quienes se han ido.
“Si caminas por las calles de México no tiene que ser Día de Muertos para que estemos llenos de calaveras, de alegorías acerca de eso. En los Días de Panteón queremos que se compruebe que Panteón no tiene fans, sino que tiene amigos, y ese día vamos a compartir con todos ellos”, dice Barajas.
El espectáculo que ofrecerán surge con la intención de regresar a las raíces del grupo, cuando tocaban en conciertos impulsados por ellos mismos, con el objeto de entrar en contacto con su público sin promotores de por medio, así como aprovechar cada momento juntos, pues son conscientes de que todo tiene un final.
“Antes de la pandemia dábamos por hecho que íbamos a regresar todos los años a Alemania, que siempre habría tocadas, de repente vino la emergencia mundial y fue una llamada de atención, creo que tenemos que aprovechar el ahora”, comparte Bonilla.
Así fue como también la banda, de más de 28 años, viajó a Alemania, a España, y ahora regresa a México con ese bagaje y unión que le han dado las giras a sus músicos, pero con la conciencia de que por tantos años de trayectoria el final puede que esté cada vez más cerca.
“Si tenemos la oportunidad de hacer el concierto pues lo hacemos, si tenemos la oportunidad de viajar, lo hacemos; no olvidarnos de que así nos hicimos, que si bien hemos tenido asociaciones con grandes empresas, también podemos hacer proyectos solos”, añade Bonilla, consciente de la diversidad que se vive actualmente en diferentes eventos musicales.