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christian.leon@eluniversal.com.mx
Si el Vive Latino es para los rockeros y el Corona Capital para los alternativos, ¿para quien es el EDC? Para todos. Aquel que crea que el Electric Daysi Carnival es solo para los amantes de la música electrónica está en un error. Hay cosas que nunca faltarán en el EDC: la brillantina, las luces neón y los rostros pintados. Pero siempre habrá otras que le dan un sello distintivo. Una es la música y sus mezclas: la electrónica es incluyente y por eso durante la primer jornada se escucharon propuestas diversas en ocho escenarios.
El músico estadounidense Jay Silva abrió este festival con su mezcla de house y dance que animó a los primeros que llegaron al Autódromo Hermanos Rodríguez.
Minutos más tarde y con un poco de mayor afluencia, llegó el turno de Bruno Martini en el escenario principal Kinetic Field que quedó impregnado con su música de raíces brasileñas. El músico es un asiduo de los escenarios mexicanos y por ello en su participación logró prender el ánimo de la audiencia.
La sangre latina del músico se sintió en sus mezclas y los presentes no dejaron de vitorearlo al compás de cada beat. La presencia nacional también destacó y para eso estuvo Boombox Cartel, el dúo mexicano que actualmente reside en Los Ángeles.
El grupo mezcló en su participación beats con temas populares como “Mambo Lupita” de Mi Banda El Mexicano, así como “Scooby Doo pa pa” original de DJ Kass.
Este dúo demostró que la electrónica no está peleada con ningún género y que incluso puede confluir en un mismo escenario.
Y es que el EDC año con año ha buscado que las distintas vertientes del eléctrico se unan y alcancen al mayor número de personas. Por ello mientas en algunos escenario había dance, house o rap, en otros, como el Circuits Grounds, el rap y el hip hop se unían a la electrónica.
Uno de los responsables de que así sucediera fue el estadounidense Nicholas Goodroad, mejor conocido en la escena de las tornamesas como DJ Joyride y que hizo que las cabezas y los brazos de los asistentes se movieran con el ritmo de sus mezclas que lo mismo incluían temas de Post Malone que de Drake.
Ambiente. El EDCes un lugar en el que conviven seres fantásticos como pokemones, unicornios, stormtroopers, hadas fosforescentes y huevos estrellados andantes.
Los asistentes al festival, aficionados de traer enormes memes en cartón y pasearlos por el Autódromo lucieron perritos, un Juanga con los brazos abiertos y por supuesto, a algunos de los personajes relevantes de la política, incluyendo a Yuawi, el niño de Movimiento Naranja.
Aunque parecía que iba a llover desde la tarde, la concurrencia a la primera edición del EDC disfrutó a pesar de que efectivamente comenzó a chispear.