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Con sentimientos encontrados, Sandoval presenta 7/11 como su primer álbum como solista en un formato de CD+DVD y documental. Se dice feliz de presentar este material, aunque con nostalgia recuerda sus inicios en la música junto a Paty Cantú en el dueto Lu que, tras tres años de éxito, se disolvió en 2007 por diferencias entre ellos.
Hoy, dice, lamenta que no sean amigos.
“Paty y yo juntos somos una mancuerna perfecta y ni ella ni yo hemos logrado lo que hicimos antes en estos años de carrera en solitario, nadie nos dijo de qué se trataba todo esto. Siempre he dicho que me arrepiento, la peor decisión de mi vida fue haber terminado con Lu y ya no somos amigos. La gente avanza, ella está feliz con su vida y sus proyectos, no le interesa desde que se acabó”.
El tapatío ahora se encuentra en otro punto de su carrera, comenta que éste es el disco de su vida, pues tardó años en prepararlo y ha sido un camino complicado por el auge de la música urbana en México.
“Entendí que tenía que hacer un concepto, un proyecto, después de Lu era mi tiempo pero no lo pude hacer como quería hasta ahorita porque cuando por fin estaba listo, hace cuatro años, vino la invasión de la música urbana y los artistas mexicanos quedamos sobrando un poquito”.
7/11 es un número clave en su vida. Comenta que en los mejores momentos de Lu y también ya como Sandoval, se le aparecía por todas partes. Le pareció una señal. El álbum cuenta con 14 temas suyos, además de la participación de músicos como Aaron Sterling, Sean Hurley, Dean Parks y Jon Gilutin, con el trabajo de Gustavo Borner como productor.
“Ya no quería trabajar con productores porque siempre terminaba peleado. No puedes juntar a dos mentes creativas porque chocan, entonces necesitaba trabajar con un ingeniero y he trabajado muy bien con Gustavo toda la vida. Estoy enamorado de mi disco, es el que siempre soñé”.
Con 41 años de vida y 16 de trayectoria artística, reconoce que estar en el mundo de la música implica vencer retos todos los días.
“Uno no tiene la carrera asegurada aunque tengas un contrato y la gente te conozca”.
Su inspiración, dice, la encuentra en las mujeres y para él, la balada representa una necesidad del ser humano para desarrollar sus sentidos.
“El universo está hecho de notas, necesitamos alimentar el alma a través de la música y por eso hay géneros, no hay artistas”.
