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Se cree que la melancolía no puede ser sinónimo de felicidad , pero para aquellos que estuvieron este fin de semana en el Plaza Condesa , saben que la tristeza mezclada con la nostalgia también puede ser motivo de alegría.
El encargado de despertar todo esos sentimientos en los mexicanos fue Patrick Watson , quien durante casi dos horas hipnotizó con su característico timbre de voz, provocando que los asistentes se rindieran ante el músico estadounidense.
Desde que llegó al foro, alrededor de las 21:00 horas el público lucía emocionado, todo esperaban ver a Patrick, quien en compañía de toda su familia (su equipo) creó el ambiente, la luz, la decoración, todo invitaba a un mundo íntimo a un lugar especial, ese que ha creado desde hace dos décadas.
Los primeros acordes de “ Dream for Dreaming ” pusieron en el ambiente amor y desamor vividos de igual manera. Los fanáticos disfrutaban de esta dualidad por igual, algunos abrazando a sus parejas en turno, otros más de amigos o incluso no falto el fan que iba solo para disfrutar de la música y la mística.
La cerveza, la compañía y la música hacían que la noche se llenara de una melancolía de la que todos disfrutaban, algunos tomando el video del momento, otros más mandando mensajes de WhatsApp a aquella persona que les recordaba la melodía. Lo cierto es que todos sabían que lo que se vivía esa noche pocas veces se ve en la Ciudad de México.
Aunque la mayoría iba a escuchar canciones emblemáticas de la carera de Watson, ahí estaban los verdaderos fans, aquellos que vibraban con las canciones de su nuevo álbum “The Wave” e incluso se las sabían.
“The Wave”, “Turn Out The Lights”, “Drive” y “Melody Noir” eran esas nuevas canciones con las que se emocionaron, vibraron y recordaron, al menos eso era lo que reflejaba el rostro de los presentes.
Patrick Watson sabía que su público no solo quería escucharlo, sino quería platicar con él. Por ello se daba el tiempo para hablar con sus fans y recordar cómo surgió uno u otro tema. El público siempre receptivo le respondía y no faltaban los “te amo” o “cásate conmigo”.
“Broken” era la señal que lo mejor de Patrick se acercaba, ya que a través de sus canciones, rompía el corazón a los presentes, pero su cálida voz recomponía los corazones rotos. A este tema le siguieron otros como “Lighthouse” y “To Build A Home”.
Sin duda la canción que más esperaron fue “Adventures In Your Own Backyard”, la cual hizo que incluso a más de le rodara una lágrima por la mejilla. Tristeza no, solo era melancolía, de esa que los fans disfrutaron, agradecieron y sobretodo recordarán cómo uno de sus conciertos preferidos.
nrv
