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Hay muchas canciones que Mario Siperman dejó atrapadas en sus sueños. Mientras dormía el tecladista del grupo argentino Los Fabulosos Cadillacs a veces se encontraba con melodías y letras que no siempre pudo trasladar a la realidad, pero ahora con los celulares lo ha logrado grabándolas al despertar.
Desde hace algunos años Siperman comenzó a reflexionar sobre la importancia de los mensajes en las canciones y por eso es cada vez más cuidadoso. El músico no concuerda con la idea de que el éxito de un tema recaiga en el ritmo pegajoso más allá del significado.
“En la música pop y el rock en general la poesía y la letra están un poco desconsideradas, en general las grandes canciones y los hits parecería que están dados por el ritmo y la melodía y no tanto por la poesía o el mensaje. Me gustaría que la música y la letra tengan igual importancia dentro de una canción. Hoy todos escuchamos canciones que tienen letras simples como ‘bailemos, movamos la caderas’, parecería que están concentradas en el sonido, pero estaría bueno ponerle el mismo énfasis y el mismo cariño a la letra”, dijo Siperman en entrevista.
Producto de la pandemia y de un sueño en el que un chamán le pedía que diera una especie de contraseña, el tecladista creó la canción “Iu Manya”, palabras que según recuerda, pronunció para salvar al mundo.
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Junto a Rubén Albarrán de Café Tacvuba y el productor ecuatoriano Juan Diego Illescas terminaron el tema para presentarlo en el Festival virtual Isla Viva, organizado por una ONG con el mismo nombre que vela por la protección ambiental en las Islas Galápagos.
“Representa que todo Latinoamérica tiene un mensaje sobre el cuidado del medio ambiente con búsqueda de nuestros orígenes prehispánicos y a la vez con la modernidad, porque también tiene música electrónica. La canción está representado el pasado, el futuro y las tres Américas. Es hacer que el mensaje sea un poco más universal”, señaló el tecladista.
Para apoyar a la causa de crear conciencia del cuidado ambiental en este archipiélago del océano Pacifico, además del matra Iu Manya, en las estrofas se escuchan frases como “Las palabras crean lagrimas de amor” y “sueños infinitos, protectores, sanadores pa’ mi gente y para mí”.
No quiere ser un superhéroe
El tema fue grabado a distancia entre los tres artistas que aportaron algo: Albarrán la letra e Illescas apoyó en cuestión de sonido. Para Siperman esta es la mejor forma de hacer que la música funcione y se explote el talento que cada quien puede aportar.
“Los músicos de hoy en día necesitamos ser ‘hombres orquesta’, necesitamos saber bailar, cantar, escribir filmar, ser musculosos, tener buenos cortes de pelo y capaz que eso sea pedir demasiado a un simple músico, capaz que podemos trabajar en equipo y hacer una buena música, si no le sale una buena letra delegarla a un poeta o alguien que tenga algo que decir, si no sabemos bailar invitar a un bailarín, parecería que hoy todos los músicos del pop y el rock tenemos que ser casi superhéroes”, señaló.
En cuanto a la inmediatez de la música y cómo ha cambiado el alcance de la industria musical a partir de las plataformas digitales, el también productor se declara a favor de los lanzamientos por sencillos, pero pide a los encargados de las discográficas que estén abiertos a nuevas propuestas.
“Me gustaría que la gente en general vuelva a tener más tiempo para sentarse en un sillón en su casa y no que sea una cosa alienada mientras viaja en un taxi o va caminando por la calle. Creo que el placer de sentarse a escuchar música deberíamos conservarlo. La industria discográfica me parece que es un poco conservadora, siempre quiere un poco más de lo que ya tuvo éxito, en lugar de innovar y el espíritu del rock justamente es lo contrario, no quedarse con lo que tenemos sino probar un poco más”.
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