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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Hace casi una década, para lograr presentarse en la Ciudad de México, Carla Morrison tuvo que vender su auto y con ese dinero comprar el boleto de avión. El regreso a Tecate, Baja California, lo conseguía, recuerda ahora, con la venta de los boletos en el recital en el que participaba.
“¡Me quedaba con 20 pesos!”, narra del otro lado del auricular. Desde Los Ángeles, California, donde ha comenzado junto con la productora y actriz Olga Segura (La hermandad y Verónica) un documental sobre su vida, la intérprete de “Déjenme llorar” y “Te regalo”, abunda:
“Me decían: ‘¡no la vas a hacer wey!, mejor intenta en Estados Unidos, en inglés; tú música es muy triste y la gente no quiere escuchar eso’. Me decían de mis tatuajes y criticaban mi peso. Ya eso hace especial este documental, porque la gente puede conectar y ver que sí se puede”.
La ganadora de tres premios Grammy Latinos recorrerá en el largometraje, aún sin fecha de salida, todas sus experiencias, incluyendo el fraude del que fue objeto.
“Cuando me comenzó a ir bien intenté ser inteligente con mi dinero pero hubo un momento en ‘Déjenme llorar’ que mi contador me robó mucho dinero y me di cuenta dos años después; yo ahorraba sin saber que tenía mucho más dinero y eso va a salir en el documental”, dice.
Efectivamente, después de los duros años de su comienzo, Morrison tuvo una época de popularidad. "Déjenme Llorar" salió a la luz el 24 de marzo de 2012, en el Festival Vive Latino. Fue nominado en los Grammy Latino en cinco categorías y a los premios Grammy en Álbum latino de rock o alternativo.
“No me quiero victimizar ante la gente, sino que sepa que un artista independiente y con la tecnología que existe, pasa por muchas cosas. Y que sean conscientes del trabajo hecho para que una rola llegue al público, entonces, es una onda de concientizar”, subraya Carla, de 32 años.
Olga Segura, por su parte, cita que la protagonista del material fue quien la invitó al proyecto. Fan de Morrison, fue enterándose de cosas que desconocía. La cantante iba en sus inicios al supermercado a comprar sartenes y ollas para experimentar con la música.
“Cuando me llamó, Carla ya había trabajado en la recopilación de material a lo largo de su carrera, lo revisamos juntas y después de varias conversaciones llegamos a la conclusión de la línea dramática y del mensaje que queríamos transmitir no sólo a los fans de Carla sino a todo aquel ser humano que necesita una historia de aliento para seguir luchando por lograr nuestros más grandes sueños”, indica.
Y es una oportunidad, considera, de mandar un mensaje de que trabajando en equipo, todo es posible.
“Es ver también quienes son las personas que la ayudaron: Natalia Lafourcade creyó en ella; platicábamos que hace falta hablar de cuál es el apoyo que nos brindamos como mujeres, hay muchas cosas que se van a tocar”.
El documental se sumará al de otros exponentes de la música, como Café Tacvba (Seguir siendo) y Zoé (Panoramas), que en la última década han mostrado su carrera en cine.
