“La Medea de Pier Paolo Pasolini iba a hacerla Mónica Miguel, esa era la primera opción del cineasta italiano”.
Esta anécdota le vino a la mente a Miguel Sabido al enterarse ayer de la muerte de Mónica, quien empezó su carrera como actriz y cantante pero luego se convirtió en una directora de referencia en el mundo de las telenovelas mexicanas.
“Pasolini quería hacer Medea con Mónica pero no era lo suficientemente conocida y llamó a María Callas, Mónica hubiera hecho una Medea fantástica por el rostro, los pómulos”, recuerda Sabido, quien la conoció justo en Italia, donde conocieron a Pasolini por diversos proyectos.
Mónica Miguel debutó como directora de diálogos en la telenovela Quinceañera, ahí inició una prolífica carrera, colaborando principalmente con Carla Estrada; fue directora de escena en locaciones de telenovelas, como Amor de nadie, De frente al sol, Los parientes pobres, Alondra, María Isabel y El privilegio de amar; en algunas también participó como actriz.
En vida coincidió con personajes de la literatura, cine y teatro. Con Salvador Novo hizo la obra La guerra de las gordas.
De joven se fue a Europa con su esposo, Noé Murayama, y allá se le abrieron puertas como cantante y actriz. Conoció a Federico Fellini, que buscaba una actriz para El viaje de Mastorna.
En los últimos años, Miguel Sabido y Mónica Miguel se reunían para comer flautas cerca de la casa de ella.
“Estoy desolado, tengo un nudo en la garganta porque se murió una amiga que quiero con todo el corazón”, dijo el director de teatro y tv a EL UNIVERSAL.
A Itatí Cantoral Mónica la dirigió en Silvia Pinal... frente a ti. “Mónica es un orgullo para los mexicanos, una de las mejores actrices indiscutiblemente”, dijo la actriz mexicana.
Mónica Miguel fue incinerada ayer, por la noche.