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En las últimas décadas los escándalos han seguido a la actriz Mia Farrow, principalmente por su disputa legal con su expareja, Woody Allen; sin embargo, la actriz tuvo una de las carreras más prolíferas y fue todo un fenómeno que marcó tendencia en las décadas de los años sesenta y setenta.
Su vida comenzó el 9 de febrero de 1945. Hija del director de cine australiano, John Farrow y de la actriz de origen irlandés, Maureen O'Sullivan, Mia nació en los Ángeles bajo el nombre María de Lourdes Villiers Farrow.
Al crecer dentro de una familia famosa lo más natural fue que Mia formara parte del medio artístico y, con solo dos años, participó en un documental a lado de su mamá y, posteriormente, en otros proyectos.
En 1968 llegó a su vida uno de los papeles más emblemáticos de su carrera y con el que todos la conocemos. "Rosemary's Baby", cinta dirigida por Roman Polanski, que consolidó a Farrow como una de las chicas más cool del momento y su imagen se convirtió en un símbolo de la liberación femenina que engalanó las portadas de revistas y los desfiles de moda.
Atrás dejó las melenas largas y femeninas para dar paso a un corte "pixie", un estilo minimalista y andrógino que arrancaba las miradas del cabello, y las colocaba en el rostro y la personalidad de quien lo llevaba. Todavía hoy es un corte que marca tendencia y que lo han lucido desde Miley Cirus, Charlize Theron, Anne Hathawey y Emma Watson, entre muchas otras.
Estuvo casada ni más ni menos que con Frank Sinatra, y aunque su unión solo duró un par de años, bastó con eso para colocarse en el ojo público y en el radar de grandes productores.
Pero la unión más polémica fue con Woody Allen, con quien vivió doce años, hasta que se descubrió que el director de cine mantenía una relación con la hija adoptiva de Farrow, Soon-Yi Previn, de 21 años.
Después de eso vinieron acusaciones en contra de Allen por abuso sexual contra la otra hija adoptiva de la californiana y, a partir de eso, ha invertido muchos años de su vida en una batalla mediática en contra de su expareja.
Con 79 años, que cumple este 9 de febrero, Mia Farrow aún se mantiene activa dentro de la actuación, aunque la realidad es que ya no goza de la fama que tuvo en su mejor época, cuando marcó tendencia y se convirtió en la chica más popular de Hollywood.
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