Megan Fox reveló el lunes 11 de noviembre, a través de una publicación en redes sociales, que está esperando un bebé con el músico Machine Gun Kelly. La actriz, conocida por su papel en "Transformers", parece estar disfrutando plenamente de esta nueva etapa en su vida, la cual ha decidido marcar con un toque de sensualidad.
La celebridad participó en una sesión realizada por la fotógrafa Tylor Klipfel, Megan mostró su "baby bump" con un look atrevido de lencería. En las imágenes, la actriz, madre de tres hijos, aparece con un top de encaje negro que deja al descubierto una parte de su abdomen, combinado con un sujetador a juego. Para completar el atuendo, lleva un velo translúcido y una pequeña falda, mientras su cabello ondulado cae suavemente sobre sus hombros. Un maquillaje con "cat eye" y unas uñas rojas en forma de almendra añadieron un toque sofisticado al conjunto.
En ocasiones previas, Megan ha compartido su amor por la maternidad y cómo disfruta de cada embarazo. Este bebé llega después de que ella y Gun Kelly, cuyo nombre real es Colson Baker, atravesaran el doloroso proceso de un aborto espontáneo, experiencia que la actriz relató en su libro "Pretty Boys Are Poisonous". En el texto, describe el dolor de ese momento con estas palabras: “Hay una ecografía al lado de la cama, 10 semanas y 1 día... ¿Crees que si hubiera podido, habría dejado una nota de suicidio? Pero ahora tengo que decir adiós. Cierro los ojos y me imagino abrazándote fuerte contra mi pecho mientras te arrancan de mis entrañas”.
La relación de Megan y Machine Gun Kelly comenzó en 2020, poco después de su separación con Brian Austin Green, con quien tiene a: Bodhi, Journey y Noah. Por su parte, Machine Gun Kelly tiene una hija llamada Cassie.
Megan Fox, como madre de tres, tiene un día a día lleno de desafíos, ya que debido a sus edades cercanas, requieren de su atención constante. Si bien tienen una relación estrecha, también hay momentos de conflicto, algo que Megan compartió en una entrevista con Kelly Clarkson: “Tienen tanta energía y son tan alborotados. Es como una pelea en la UFC”, comentó, entre risas.
Para Megan, ser madre ha sido una experiencia transformadora que la ha ayudado a crecer como persona. Aunque su vida está constantemente expuesta al ojo público, prefiere que sus hijos sigan su propio camino y no los presiona para que estén en los reflectores como ella.
Noah Shannon, nacido en septiembre de 2012, tiene 10 años y desde muy pequeño ha mostrado un gusto por la moda, especialmente por los vestidos, una pasión que comenzó a desarrollar a los 2 años. “Lo inscribí en una escuela muy liberal y hippie, pero incluso allí, en California, algunos niños le dicen: 'Los niños no usan vestidos' o 'Los niños no usan rosa'”, contó Megan. A pesar de las dificultades sociales que ha enfrentado, Noah ha crecido con mucha confianza, enfrentando el bullying y los prejuicios. Además, es un niño muy creativo que disfruta diseñando, dibujando y tocando el piano.
Mientras que Bodhi Ransom, nacido en febrero de 2014, tiene 9 años y es el más parecido a su madre, con sus grandes ojos azules y largas pestañas. Es conocido por su honestidad y su deseo de hacer lo correcto. Su nombre, que significa "Iluminado" en el budismo.
Por último, Journey River, el más pequeño, nació en agosto de 2016. Su llegada ocurrió en un momento complicado para Megan, quien atravesaba una difícil racha tras su divorcio en 2015. A pesar de las circunstancias, Fox expresó sentirse muy feliz con la llegada de su hijo. Journey, que a sus pocos años ya demostraba una increíble memoria, es el más travieso de los tres, pero también es encantador. Con solo 3 años, ya conocía al menos mil 600 especies de dinosaurios.