se ha abierto como pocas veces, y lo hizo en el espacio de Yordi Rosado este domingo, donde compartió al menos 7 situaciones que marcaron su vida, y que le han ayudado a ser lo que es hoy, un actor que además prepara lo que llama como un “híbrido”, donde incluirá testimonios y canciones sobre su experiencia con las adicciones.
1.- Ser dado en adopción,una infancia difícil.
Mauricio Ochmann compartió que su madre biológica decidió darlo en adopción en Estados Unidos, ella era norteamericana y tenía 15 años, mientras que su padre biológico era español y tenía 16. Nació en Washington, y fue dado en adopción en un proceso en el que la única pareja de mexicanos que aplicó, lo adoptó: María y Guillermo.
Sus papás se divorciaron cuando él tenía un año y medio, por lo que Ochmann viajó a Querétaro con su mamá, quien tiempo después volvió a hacer su vida con Thomas, segundo padre adoptivo del actor. La vida con su mamá no fue la mejor, pues tuvo muchas vivencias traumáticas, también le tocó cuidar a sus hermanos, quienes sí eran hijos biológicos de María.
A los 13, luego de un asunto muy violento en casa, su mamá le dijo: “Lo mejor que puedes hacer es irte de esta casa”, por lo que Mauricio hizo un plan: acabar la prepa para buscar su camino, pero restableció contacto con Guillermo, quien estuvo en su vida hasta que murió en 2020.
A raíz de diversas situaciones, Mauricio cortó lazos con su mamá adoptiva, y hasta ahora no se hablan.
2.- Las adicciones
En la entrevista, contó que probó la cerveza a los 8 años, y desde muy joven comenzó a consumir alcohol, pero de allí saltó a la cocaína, que fue lo que lo sumió en un agujero que casi lo mata.
“La mota como que no me encantó y la cocaína sí, como que mi cuerpo dijo: ah, de aquí soy, eso de alguna manera revolucionó mi proceso, pues las drogas como que aceleran el proceso adictivo y bueno, fondos tuve varios, me pude haber muerto en varias ocasiones”, platicó.
3.- Estar cerca de la muerte
Debido a sus problemas de adicción, Mauricio Ochmann estuvo cerca de la muerte, una vez por una sobredosis que, de no haber sido porque alguien que trabajaba con él lo encontró a tiempo, no se hubiera salvado.
“Mi cuerpo se empezó a desvanecer, perdí el conocimiento y de repente me despierto en el hospital, me estaban reanimando”, contó.
También dijo que estuvo a punto de suicidarse, de comprar una gran cantidad de las drogas que consumía y encerrarse, poner punto final a su vida, pero su hija lo salvó.
“Había planeado morirme, yo dije: no valgo para nada, ya me voy, y le llevé a mi hija un peluche y lo puse en su cama, ellas (su hija y su mamá) no estaban, y yo ya estaba listo para hablarle al dealer, para pedir una cantidad considerable, encerrarme solo y en ese momento fue muy fuerte porque algo de mí me dijo: Mau, has vivido una vida de muerte, has estado tratando de sobrevivir a todo lo que te ha pasado, ¿por qué no te das la oportunidad de vivir? me invadió una paz y le hablé a un conocido, al que fue mi padrino cuando intenté dejar de beber y le dije: ahora sí estoy listo, llévame a una clínica”.
Lo que Mauricio nunca olvidará es que cuando le habló a la mamá de su primera hija, María José, para contarle que estaba por internarse, ella le comentó que lo iba a acompañar. Y así fue. Desde entonces el actor no ha recaído. Y mantiene una muy buena relación con ella.
4.-Su encuentro con el narco
Cuando hizo "El Chema", Ochmann se hizo muy, muy famoso, pero tocó otro fondo cuando se dio cuenta de que muchos niños admiraban y querían ser como el narcotraficante al que le daba vida, y eso fue algo definitivo. Mientras lo interpretó, de hecho, el narcotráfico lo interceptó en algún momento, y él mismo compartió esa experiencia.
“Tuve una experiencia fuerte, me interceptaron en una carretera, yo creo que el que iba manejando sabía, me estaban llevando a un evento de un lugar a otro, me interceptaron después de pasar dos o tres retenes, ahí es cuando te das cuenta, el conductor me dijo “voy a echar gas”, y era un trayecto de 45 minutos, yo dije que qué raro, se metió a la gasolinera y vi a un cuate como que paró el cuello. Llegaron (muchas personas), tocaron la ventana y me dijeron “el patrón lo quiere conocer” y dije “bueno, pues ni modo, vamos a conocer al patrón”, en ese momento no di más de 25 pasos y de repente llegaron siete, ocho camionetas, eran los de a deveras, se bajó el patrón (y dijo), “¡Chema! me dio un abrazo y me dijo perdón que te hayamos tenido que interpretar así pero si no, ¿cómo te conocemos?”.
Meses después de ese encuentro, el sujeto en cuestión fue asesinado.
Cuando Ochmann interpretó al Chema. Foto: Archivo EL UNIVERSAL
5.- La terapia
Gracias a la terapia, el actor descubrió que toda su vida había estado haciendo una muerte lenta, que no sabía cómo lidiar con sus emociones, con sus monstruos del pasado, con su infancia tan difícil, y por eso estaba haciéndose todo ese daño, lenta y dolorosamente. Desde entonces, el actor toma terapia y hasta ahora, es algo que es parte de su vida.
6.-Decidir separar caminos
En su relación con Aislinn, Mauricio Ochmann se convirtió en padre por segunda ocasión, de la pequeña Kailani, y reconoció con Yordi que de alguna manera,
la serie “De viaje con los Derbez” sumó a la decisión de separar caminos, y dijo que fue él quien tomó y comunicó la decisión.
Instagram Mauricio Ochmann.
“(Le dijo a Aislinn) creo que estamos en caminos distintos, y creo que le hemos echado ganas durante cinco años, seis años, tenemos una hija maravillosa, nos adoramos, pero te tengo que dejar crecer y vivir tu proceso y nos estamos metiendo el pie, y me parece muy egoísta querer aferrarse y que las cosas salgan a fuerza”.
Contó que en esa serie de la familia de su exesposa, Ochmann tuvo varios encontronazos porque no se respetaban los tiempos de su hija y su rutina.
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