Los problemas cardiacos que presentó la actriz Maribel Fernández La Pelangocha hicieron que pensara que se iba a morir, por lo que dijo sentirse tranquila, si eso hubiera ocurrido.
Afortunadamente, dijo, ya está mucho mejor gracias a una operación que duró 12 horas, en la que le insertaron un marcapasos doble y una válvula mecánica, lo cual es lo que la ha mantenido con vida.
“Le dije a Dios: ‘gracias, ésta es tu voluntad, tengo mis maletas hechas, no le debo nada a nadie, lo que tú me digas, pero una vida como la que estoy llevando ya no, apiádate de mí’”, dijo la actriz antes de ingresar al quirófano.
Comentó que, durante los tres años de la pandemia, su salud se fue deteriorando, lo cual consideraba ya no era vida.
“Ya no podía caminar, literal, dos pasos y ya estaba (agitada), era horrible noche y día, pesaba 49 kilos, estaba muy mal, ya no podía, en mi casa subía las escaleras a gatas porque no podía, entonces yo le pedía a Dios que me llevara”.
Entonces se abrió el área de cardiología en un hospital de Tlalpan, porque antes había sido utilizado para asuntos del Covid-19, y volvió a ir con los médicos.
“Me encontré con unos cardiólogos maravillosos, que me dijeron: ‘ahorita nos hacemos responsables’. Son gente tan chingona, y pude salir adelante, pero me dijeron que me despidiera porque posiblemente no aguantaría las 12 horas que duraba la operación”.0
Su hija Juliana tuvo mucha fortaleza ante este momento, aunque sí se quebró, indicó la artista quien formará parte de la segunda temporada del programa de comedia Tal para cual.
“Todos estamos haciendo nuestro trabajo, siento la calidez de cada uno, vivamos cada momento, no sabemos si al rato nos lleva el carajo”.
El programa de comedia producido por Reynaldo López, para Televisa, inició grabaciones ayer. Maribel da vida a Nacorita, la mamá de Consuelo Duval.