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“Agradezco la amistad, el corazón, el arte, la música, la literatura que nos dejó Armando; bien agradecido con él y un hasta siempre”, expresó ayer entre lágrimas Rubén Albarrán, vocalista del grupo Café Tacvba, antes de que el cuerpo de su amigo Armando Vega Gil fuera llevado al panteón Los Cipreses de Naucalpan para ser sepultado.

Rubén, que siempre ha exaltado la unión y se ha pronunciado por la paz, dijo que confiaba en que la muerte de su amigo traiga luz.

El líder de la banda comentó que por siempre recordará al Cucurrucucú, quien se quitó la vida la madrugada del lunes, tras señalamientos de acoso sexual, como el ser grandioso que era su amigo.

“Compartimos cantos, nos sentamos a rezar juntos, me llevo su amor, su amistad”, expresó en la funeraria ubicada en la colonia Roma.

Sólo esperaba que esta tragedia, dijo, dejara una lección.

“Deseando corregir nuestro camino, nuestra visión, que nos podamos relacionar de mejor forma con todos, con nosotros mismos, con nuestra parte femenina, que seamos amorosos y deseando que esta trágica eventualidad nos traiga luz a todos”.

La actriz Claudia Ramírez y el músico Sergio Arau, ex Botellita de Jerez, también acudieron.

Adiós con “Guaca Rock”. Con una emotiva ceremonia religiosa, aplausos y cantando “Guaca Rock de la Malinche”, familiares y amigos se despidieron del ex integrante de Botellita de Jerez.

Dolor, tristeza y una que otra sonrisa para contrarrestar el ánimo, así le daban el último adiós a Vega Gil.

A las 14:00 horas, la carroza arribó al cementerio de Los Cipreses en el Estado de México, en donde ya lo esperaba el ministro Rodolfo Carretero, quien oficializó la ceremonia religiosa, en la capilla del lugar.

Al término de la misa y en medio de los medios de comunicación, trasladaron el ataúd al lugar en donde sería enterrado, seguido por todos sus amigos y la madre del cantante, quien apenas pudo decir las palabras de despedida: “Hijo mío, Dios te bendiga y te acompañe, tu papá te está esperando”, antes de romper en llanto.

Y entonces nadie podía contenerse; lágrimas en los rostros, especialmente en el de Francisco Barrios El Mastuerzo, baterista de la banda, quien constantemente se cubría, mientras que el guitarrista Santiago Ojeda —también integrante de Botellita de Jerez— se esforzaba por no desplomarse enfrente de sus amigos.

Muchos, sin poder concebir aún lo que estaba sucediendo, empezaron a despedirse de Vega Gil lanzando flores al ataúd que en un instante sería cubierto de tierra; tras algunos minutos de silencio, una persona puso música de Botellita de Jerez en su celular. Al comenzar “Guaca Rock de la Malinche”, algunos bailaron y otros cantaron en honor a Armando.

Vega Gil dejó un mensaje en su cuenta de Twitter explicando su decisión de quitarse la vida, al sentirse aterrorizado por la acusación de una mujer que se unió #MeTooMusicosMexicanos, y con el fin de proteger la integridad de su hijo, quien no asistió al funeral. “Lo que menos deseo es que mi hijo se vea afectado por la falsa acusación que se me hace. Debo aclarar que mi muerte no es una confesión de culpabilidad, todo lo contrario”, escribió.

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