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El telón del Teatro de los Insurgentes se cerró para el musical "Mamma mia!" el fin de semana pasado, pero la aventura no termina para la compañía porque en febrero iniciará una gira por el interior de la República mexicana.
“Es emocionante, sobre todo por la gente que está esperando Mamma mia! en el lugar en el que vive, además de que siempre es excitante moverte y llegar a distintos escenarios, que al parecer serán grandes, pero sobre todo es lindo volver a las giras, pues ya llevábamos mucho tiempo sin hacerlas, desde antes de la pandemia, al menos las obras de gran formato, entonces esperemos que se sumen muchas fechas más”, dijo Lisset, quien protagoniza este musical con el personaje de Donna.
"Mamma mia!" iniciará su recorrido el 10 de febrero en Monterrey en el Auditorio Pabellón M, seguirá en Puebla el 17 de febrero en el Auditorio del CCU, 23 y 24 de febrero en el Auditorio Galerías de Guadalajara, y el 1 de marzo llegará a Querétaro al escenario del Auditorio Josefa Ortiz.
Alex de la Madrid, quien da vida a Sam, consideró que es triste despedirse de una temporada como la que tuvo esta obra en el Teatro de los Insurgentes, pero también es importante llevar el montaje hasta la gente que no puede viajar a la Ciudad de México para verla, y sobre todo presentarla con la misma calidad en sonido, iluminación y escenografía que aquí.
“Por eso, más que despedirnos con tristeza, lo hacemos con la frente muy en alto”, comentó Alex de la Madrid.
Lisset compartió que durante la temporada llegó un punto en que ya sólo disfrutaban lo que se hacía en escena, pero sin perder la atención y el profesionalismo que se necesita, pero ya la conocían perfectamente y las cosas fluían solas, así que hasta el final todo fue gozar en "Mamma mia!".
“Hemos sido muy afortunados porque veníamos de una crisis bastante grande, sobre todo en el teatro y lograr más de 200 representaciones, estar en un teatro como es el Insurgentes que es de gran tradición, y lograr un año de temporada, me parece que es un regalo y un logro bastante grande”, comentó de la Madrid.
Para ellos contar cada fin de semana la historia de Sophie, quien a sus 20 años está a punto de casarse, pero para hacer este momento completamente feliz, desea saber quién es su padre, así que invita a la boda los tres enamorados de su madre Donna, a Sam, Harry y Bill; fue toda una escuela para ellos, donde no faltó entrega y pasión.
“Fue un curso intensivo de disciplina, de amor al proyecto, de retos personales, de descubrir cosas nuevas, sobre todo de compromiso con el público, que es que salga contento; fue una obra afortunada, luminosa, de mucha alegría, de conectar a las generaciones a través de la música, que te lleva a la nostalgia y a un lugar muy bonito”, finalizó Alex de la Madrid.
