En medio de una noche lluviosa, el preestreno de la obra "El mago (The Wiz)", parecía podría retrasarse por la llegada de Lucero y Mijares al Teatro Hidalgo, que se había complicado por el clima en la capital.
En las entrañas del recinto el elenco ya estaba preparado, con su protagonista como la estrella de la noche, Lucero Mijares haciendo oficialmente su debut en el teatro musical, con su familia en las primeras butacas del teatro.
Tarde pero seguros, llegaron los padres de la joven de 18 años, y tomaron un tiempo para desearle lo mejor a su hija.
"Contentos ilusionados, queremos desearle la mejor de las suertes, todo el éxito en esta carrera que ella comienza por sí misma, que bueno que pueda pararse en el escenario solita, ahí no va haber papá y mamá que le digan pa acá y pa allá", dijo Lucero a la prensa en su llegada al teatro.
Por su parte Mijares, reconoció sentirse incluso más nervioso que cuando presentó su concierto sinfónico en Bellas Artes, y fue preparado con kleenex y pañuelos para las emociones que probablemente su hija les haría desbordar.
"Yo no he podido venir, no me ha dejado, claro me enseña sus ensayos en el teléfono me ha enseñado todo desde el principio pero es la primera vez que voy a ver todo completo, traje mi pañuelo para escucharla, porque sé que vamos a llorar mucho", dijo Mijares con una sonrisa, emocionado por el debut de su hija.
Lucero Mijares ha demostrado tener una gran capacidad para el canto en presentaciones junto a sus padres, y Lucero si bien la ve con una gran capacidad aceptó aún le queda mucho tramo por recorrer.
"La veo con una intuición como si llevara siete u ocho años en esto, pero evidentemente seguirá aprendiendo, entendiendo y dominando muchas cosas, pero me impresiona su capacidad, y esa voz que tiene privilegiada le pido a Dios que se la conserve toda la vida" , señaló Lucero.
Y para no presionarla solo decidieron darle algunos consejos antes de la noche tan especial, que vivieron en el preestreno de este jueves 6 de julio.
"que tenga disciplina, entrega, pero sobre todo, sobre todo que disfrute, porque la vida se pasa en un dos por tres", finalizó Lucero
Una vez en las primeras filas del Teatro, junto a María del Sol, Lucero Mijares hizo aparición, y de principio a fin emocionó a sus padres.
Aplaudieron y se volcaron en cada uno de los montajes donde su hija participó cantando, actuando, y bailando todo tipo de técnicas de danza, y alcanzando cada una de sus notas.
En ese recorrido del camino amarillo que mientras recorría con los presonajes de la historia, lo hacía también con el amor y el respaldo de sus padres entre el público.