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Si hubiera que definir a Eva Longoria en pocas palabras, diríamos que es una mujer de gracia y fortaleza, un ícono que encarna la armonía entre sus profundas raíces latinas y una carrera exitosa en Hollywood.
Más que una actriz, ella se ve como una embajadora cultural, una voz para la comunidad latina que simboliza la lucha por la diversidad y la inclusión. De hecho, en estas fechas, uno de sus mayores deseos es abrir caminos para que nadie en Latinoamérica se sienta segregado por su identidad.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Eva habla sobre este anhelo, así como de la forma en que celebrará la Navidad junto a su esposo, el empresario mexicano José Bastón, y su hijo Santiago, combinando tradiciones mexicanas y estadounidenses, desde la preparación de tamales hasta el adorno de un majestuoso árbol navideño.
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¿Cómo te fue en este 2023?
—Me fue increíble, un año increíble, con mi primera película (Flamin’ Hot: El sabor que cambió la historia), viajando por todo el mundo enseñando este proyecto, mostrando mi trabajo, era una gran meta que tenía en mi vida.
Tu filme tiene un gran mensaje para los latinos...
—Yo espero que se motiven y se den cuenta de que pueden lograr sus sueños porque la historia de Richard Montañez es real. Él era un limpiador de una fábrica y terminó como ejecutivo de Frito-Lay, es responsable del snack número uno en el mundo, una marca que vale cuatro millones de dólares, y todo salió de un mexicano-americano, él tenía un sueño por el que estaba luchando toda su vida.
Si se trata de pedir deseos, ¿cuáles consideras urgentes en los derechos latinos?
—Hay muchos. Viene un año de elecciones para nosotros, se hablará de muchas cosas, pero la economía siempre es el asunto número uno para los latinos que quieren trabajar y ganar una vida con dignidad. Nuestra comunidad en Estados Unidos es mucha, los latinos sí importan, y deben saber que queremos vivir con dignidad y vivir en paz.
Es tiempo de las mujeres...
—Sí, aunque la gente piensa que Hollywood es muy progresista, pero no, necesitamos más mujeres detrás de cámaras. Parece que lo estamos haciendo muy bien porque este año estuvo Barbie, Taylor Swift, las mujeres tuvimos un año en grande, pero necesitamos más espacios para trabajar y tener oportunidades como los hombres, no tenemos las mismas oportunidades. Necesitamos a más mujeres detrás de cámara porque la persona que contrata a más mujeres es una mujer.
¿Cómo viven ustedes sus fiestas navideñas?
—Vamos a estar en Estados Unidos con mi familia y con la familia de Pepe también haciendo tamales, somos de poner el arbolito, uno muy grande. Santi ya está en una edad que va a entender de Santa Claus, porque antes le daba igual, pero ahora ya va a entender, le va a dejar regalos y todo eso.
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¿Qué tradiciones compartes con tu hijo?
—Mi hijo es mexicano, le encanta vivir aquí en la Ciudad (de México), siempre estamos viajando. Estoy grabando en España para una serie; yo tenía que estar en Francia un rato y en Estados Unidos, pero sabe que su hogar es México, me gusta esto, le encanta su cultura, sabe que sus raíces son de México.
¿Cómo hacen para dividirse entre España, Estados Unidos y México?
—Es fácil porque tenemos mucha familia y amigos, tengo una casa en Marbella; tenemos amigos y familiares, como en otros lugares. Siento que en donde estemos nos sentimos en casa.
¿Un anhelo para Año Nuevo?
—Seguir poniendo el camino para nuestra comunidad latina, que las cosas sean más fáciles que cuando inicié yo. Espero apoyar proyectos donde pueda contratar a más latinos atrás y delante de la cámara para que haya más oportunidades para nosotros.
