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Con sus habilidades y entrenamiento especial, los personajes de Liam Neeson han enfrentado en el cine las situaciones más peligrosas, pero ninguna misión parece tan complicada como salvar la relación con sus hijos, para la que no estaba preparado.
Como el empresario alemán Oskar Schindler salvó de morir a más de mil de judíos durante la Segunda Guerra Mundial, en La lista de Shindler; en La amenaza fantasma, de la franquicia de Star Wars, su personaje Qui-Gon Jin era un respetado maestro Jedi, y como el exagente Bryan Mills, de Búsqueda implacable, el que más se ha quedado en la mente de sus seguidores, era un héroe de acción para el que nada es imposible, pues realiza hazañas de inteligencia y enfrentamiento cuerpo a cuerpo, además de dominar las armas.
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Ahora, con su nueva cinta Contrarreloj, Neeson tiene que salvar el día de nuevo pero con una diferencia: su personaje, Matt Turner, es un hombre común y vulnerable, que quiere crear un vínculo fuerte con sus hijos, hecho que para el director Nimród Antal lo vuelve cercano al público.
“Sus otras películas se confrontan con este papel; aquí Liam también es un hombre solitario que quiere resolver todos sus problemas solo, pero esa obstinación se ve confrontada por su familia, que busca tener contacto con él. Es entonces cuando el personaje de Liam tendrá que despertar si es que quiere salvar la vida de quienes ama, y salvar su matrimonio”, cuenta Antalen en entrevista.
En la película Matt Turner (Neeson) se encuentra alejado de su familia por su obsesión con el trabajo. El único día que decide llevar a sus hijos a la escuela descubre que alguien puso una bomba en su camioneta para manipularlo: nadie bajará del auto hasta que Matt cumpla todo lo que el terrorista le pida.
Todos esperarían que el personaje de Liam salve la situación con sus habilidades militares como sucede en Búsqueda implacable, o más recientemente en Luz negra (2022), pero no.
“En todas sus películas es un hombre que resuelve todo con su conjunto de habilidades especiales, pero en esta película no, sólo buscará hacer un vínculo fuerte con sus hijos para salir vivos del atentado, en este papel sólo es un padre cuidando a sus hijos, y eso hará que sea identificable para mucha gente”, detalla Nimród.
El cineasta reitera que la temática familiar fue lo importante más allá del suspenso, así como la dinámica entre ellos: dentro del auto en el que se ha puesto la bomba se encuentran la hija e hijo de Matt Turner (Neeson).
“Lo que le da corazón a la película es esta disfunción familiar que está en juego, verlos vivir sus propias experiencias más allá de los elementos de suspenso. Sentí que en realidad eran las relaciones dentro del auto entre hermanos, entre padre e hija o hijo y padre, lo que hizo que funcionara, esa relación que Matt busca sanar conforme avanza el conflicto”.
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Hacen equipo
Nimród explica que entró a dirigir el proyecto por encargo. El factor definitivo para aceptar hacer la película que este 31 de agosto llega a salas, fue que Liam Neeson la protagonizara, pues sabe que el resultado final depende de la calidad de los actores.
“Siempre estoy nervioso sin importar quiénes sean los actores, porque quiero cumplir con las expectativas, y quiero asegurarme de que los actores sientan que tienen un compañero en mí. Pero cuando trabajas con alguien como Liam gran parte del trabajo pesado ya está hecho”, asegura.
“El trabajo de director se trata simplemente de estar para ellos y asegurarnos de que se sientan seguros y cómodos. Los actores lo aprecian y también cuando reconoces que hay un momento en el que simplemente disminuimos la velocidad para concentrarnos en lo que hay que hacer”.
Nimród, quien ha trabajado en películas como Kontroll (2007) y Predators (2010), además de dirigir capítulos de la serie Stranger things, comenta que su siguiente paso es mostrar historias propias que está escribiendo.
Neeson, en tanto, espera el estreno de tres filmes más, mientras se resuelve la huelga del sindicato de actores, del que es parte.
