ya era famosa antes de nacer, por ser la hija de Salma Haye k y del multimillonario François Henri Pinault , quienes han vivido un tórrido romance de cuento de hadas, pero no siempre fue así, también la pareja ha tenido sus momentos obscuros.
Es por ello que recordaremos esta historia de amor que casi termina cuando Valentina tenía meses de haber nacido.
Todo comenzó cuando la pareja se conoció en 2006 durante una cena de gala organizada en el Palazzo Grassi en Venecia, Italia, en ese entonces, Salma tenía 39 años y François 44.
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De acuerdo a algunas declaraciones que ha hecho la actriz mexicana, ella nunca imaginó que su príncipe azul sería un magnate millonario, porque ese estilo de vida lujosa no va con ella. Tan sólo quería llevar una vida tranquila en algún rancho cuidando y salvando a muchos animales que han sufrido maltrato.
Pero el flechazo llegó sin avisar, y el cómo sucedió se lo ha guardado Salma para sí misma porque nunca ha querido hacer público la manera en cómo la conquistó, ni esos momentos románticos que vivió y le robaron el corazón.
“No voy a decir cómo nos conocimos. Es una historia tan romántica, increíble... Pero es mía. No quiero vulgarizarlo convirtiéndolo en una historia para hacerme la interesante”, confesó en 2019 para la revista "Town & Country".
Su relación amorosa era tan perfecta y todo era miel sobre hojuela que, tras 11 meses de haber iniciado su romance ya hablaban de matrimonio. Todo se empezó a desmoronar debido a sus compromisos laborales y el distanciamiento, porque la veracruzana tenía su vida en Los Ángeles, Estados Unidos, mientras que su amado vivía en Francia por ser el CEO de la empresa Kering, que es dueña de firmas como Gucci, Yves Saint Laurent, Alexander McQueen, Bottega Veneta y Puma, residía en Francia.
La distancia y el trabajo influyeron para que la pareja cancelara los planes de boda y su futuro, no dieron razones del porque y eso aumentó las especulaciones de muchos de sus seguidores debido a su rompimiento abrupto.
En ese momento el escandaló estalló cuando la prensa europea aseguraba que había sido por las infidelidades de Pinault con la modelo canadiense Linda Evangelista. Porque tras haber terminado con Salma empezaron a tener un fugaz romance que hicieron público.
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La relación no duro mucho, por lo que aumentaron las sospechas de infidelidad.
Mientras todo esto sucedía, el empresario no dejo de ver a Salma, el amor pudo más y la actriz quedó embarazada, una noticia que llenó de felicidad a la pareja y dio pie a que retomaran sus planes de boda.
Fue el 21 de septiembre del 2007 cuando la mexicana dio a luz a su primogénita Valentina Paloma Pinault-Hayek. Y aunque en ese momento se consideraba a la pareja como una de las más consolidadas del espectáculo a unos meses de dar a luz de nueva cuenta decidieron separarse.
“Estamos tristes por anunciar que el compromiso de Salma Hayek y Francois-Henri Pinault ha sido cancelado. No habrá mayores declaraciones,” dijo un comunicado de la portavoz de Hayek, Cari Ross.
Salma Hayek y François Henri Pinault en 2012. AP
Pasaron así algunos años en los que la pareja vivió separada, pero fue durante el festejo de los siete años de su hija cuando la chispa del amor volvió a tomar gran fuerza y retomaron ese tórrido romance que había quedado pausado.
En febrero de 2009 celebraron una pequeña boda por la vía civil en París, y un mes después celebraron la boda religiosa en el mismo Palazzo donde tres años atrás la pareja se conoció, mientras que la celebración y la cena tuvieron sede en el Teatro La Fenice en Venecia.
Hasta la fecha la pareja disfruta de su historia de amor y del camino que han construido juntos con su pequeña hija Valentina, quien quiere seguir los mismos pasos de su madre, así lo reveló a la revista Vogue, medio en donde se retrató por primera vez con su madre.