Los Ángeles.— Han pasado 30 años desde que vimos a Michael Corleone (Al Pacino) sentado en una endeble silla de madera contemplar su vida. "El Padrino: Parte III" (1990) marcó el punto final de la saga que había iniciado en 1972 tras el semblante de Marlon Brando como don Vito Corleone y que le dio a su director Francis Ford Coppola fama mundial y premios de la Academia por Película en las primeras dos cintas de la historia gestada por el novelista Mario Puzo.
“Ya sabes que cuando se habla de El Padrino y El Padrino: Parte II se dice que son de las más grandes películas de la historia; pero siempre El Padrino: Parte III es como la hermana pobre”, dice a EL UNIVERSAL en entrevista zoom Coppola, flanqueado de botellas de vino cultivadas en su hogar en California.
Con el pretexto de las tres décadas de su filme, Coppola consiguió subir a bordo a Paramount Pictures para una remodelación de su película. Cada fotograma fue pulido con calidad 4K y el audio de la cinta es totalmente envolvente y digital.
A la vez, el director reacomodó escenas de la película, eliminó segmentos y consiguió con ello nuevos inicio y final, rebautizando todo como El Padrino, Epílogo: La muerte de Michael Corleone.
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El estreno en cines —70 salas en México— es mañana y estará en cartelera hasta el domingo. Luego, se podrá rentar o comprar vía digital esta nueva versión que en 1990 causó controversia por la presencia de Sofia Coppola, hija de Francis, interpretando a Mary, quien sostiene un romance prohibido con el galante mafioso Vincent (Andy García).
“Siempre ha sido una herida clavada que la prensa de aquella época se fuera contra Sofia, diciendo que ella había arruinado El Padrino: Parte III“
FRANCIS FORD COPPOLA, Cineasta
“Siempre ha sido una herida clavada en mí que la prensa de aquella época se fuera contra Sofia, diciendo que ella había arruinado El Padrino: Parte III. Ella existe en el filme para representar justo lo que era, una jovencita inocente y cándida. ¿Cómo podrías decirle a una chica de 17 años que ella es responsable de arruinar la película de su papá? Se supone que esas críticas deberían estar dirigidas a mí, no a ella”, confiesa Coppola en un tono indignado, hablando sobre su hija, quien ahora es una ganadora del Oscar de Guión gracias a su película "Perdidos en Tokio".
Pero, si algo queda claro después de ver "El Padrino, Epílogo: La muerte de Michael Corleone", es que la historia de amor trágico entre Mary y Vincent es el corazón de esta conclusión, donde la nueva edición pone el destino de esta pareja contra la decisión de Michael, como jefe de la familia, de limpiar su nombre y de los suyos de una vez por todas.
“Originalmente Paramount estaba muy emocionado de hacer muchas películas de El Padrino, incluso más de tres, pero yo les dije: ‘No creo que exista demasiado Padrino porque básicamente no es una historia del género de aventuras, sino que es una tragedia. Es una tragedia moral’. Pero les dije: Yo creo que sí podemos hacer la tercera parte, si la convertimos en un coda (especie de epílogo), una manera de envolver y hacer un sumario de los temas principales de El Padrino y El Padrino: Parte II“, explica el director de 81 años, quien en este 2020 puede enfatizar con su nuevo corte este sentir de conclusión.
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La oferta que simplemente no puede rechazar
Plagado de anécdotas del rodaje de sus tres cintas emblemáticas que le dieron 19 nominaciones al Oscar y nueve estatuillas (lo que catapultó al propio Coppola como el padrino de una generación de realizadores egresados de escuelas de cine, como George Lucas, John Milius, Robert Zemeckis y Steven Spielberg), Francis dice que recomendó a Martin Scorsese para dirigir "El Padrino: parte II".
“Todas esas frases que ahora la gente repite de los filmes de El Padrino provienen de la sabiduría de la mamá de Mario Puzo. Me da mucho gusto que la gente se haya encariñado con estas películas. La verdad es que es una película sobre la familia, hecha por una familia. Mi hermana Talia (Shire) aparece muy hermosa como Constanza Corleone, mi papá (Carmine) hizo parte de la música y mi hija Sofia es parte del reparto. No podría estar más orgulloso”, culmina Coppola mientras cuenta que su viñedo “sabe a cine”.