La serie "La reina del sur" inició en 2011 como un drama cuyo protagonista, además de la actriz mexicana Kate del Castillo , era el narcotráfico , sin embargo se ha transformado y así lo considera uno de los actores del elenco, el chileno Tiago Correa.
El actor comparte que se encuentra filmando la tercera temporada de la serie de Telemundo de la que adelanta que "está quedando súper bonita, estamos metiendo todas las ganas para poder, ojalá, repetir el Emmy que tuvimos a principios de este año".
En su primera temporada, conocimos la historia de Teresa Mendoza quien era novia de un hombre que vivía en el mundo del narco y que tras su muerte debe esconderse por las represalias que pudiera tener; conforme avanza la trama basada en la novela de Arturo Pérez-Revierte , Teresa se va convirtiendo en traficante y en los giros de su vida la vemos bajo la protección de la DEA, para después volver al mundo del crimen.
En la segunda tanda de episodios, de 2019, Tiago llegó para dar vida a Jonathan Pérez, agente de la DEA que protege al personaje de Kate.
El actor comparte lo que opina sobre hablar del narco en televisión.
"Genera un conflicto que es bueno ponerlo sobre la mesa, de endiosar a los personajes que pertenecen a los cárteles y al narcotráfico, y genera una duda y un enfrentarse y es algo que está en nuestra sociedad mexicana y que también por otro lado sería irónico de nuestra parte mirar hacia otro lugar y decir que no existe", dice en entrevista.
"Creo que estamos un poco saturados de esas historias y lo que me deja tranquilo de pertenecer a La reina del sur es que ya estamos lejos de esa temática, viajamos a un thriller político, ya no se habla de narcotráfico sino de intereses políticos", adelanta.
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El histrión, que esta semana presentó en el Festival de Cine de Guanajuato la cinta "Malibú", donde es protagonista, señala que no puede adelantar cómo cambia su personaje para la tercera temporada próxima a estrenarse pero se sabe, según confirmó Telemundo a mediados de año, que tendrá locaciones de América Latina como el Salar de Uyuni en Bolivia, Machu Picchu en Perú, los glaciares en Argentina y Santa Marta en Colombia.
Además se ha filmado con todos los protocolos necesarios por la pandemia del Covid-19.
"Al principio siempre es muy extraño lo de los protocolos pero creo que la industria ya lo está normalizando, ya las producciones lo entienden muy bien y todas las personas que estamos ahí dentro del crew entendemos que cuando te dicen que te pongas el tapabocas ni siquiera te cuestionas", señala Correa.
"Es un respeto que tenemos que tener todos para seguir produciendo porque si esta maquinita se para hay mucha gente que se ve afectada, no solamente nosotros sino la gente que espera ver un contenido para estar con su familia, compartir con su pareja o hijos. Al final hacemos nuestro oficio para ellos".
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