El dictamen durante el juicio a Pablo Lyle ha generado un amplio debate. Mientras que hay algunos famosos que han salido a darle su apoyo, otros han dejado en claro que finalmente llegó la justicia para la familia de la víctima. Es que están los que consideran que actuó en defensa propia pese a que las imágenes siguen siendo contundentes de aquel trágico día.
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Desde el 2019, Pablo Lyle aguardaba por una condena. Incluso llegó a cumplir una prisión domiciliaria por un tiempo. Sin embargo, ya han pasado casi 3 años desde el hecho que cambió para siempre la vida del actor y la de la familia de la víctima. Lo cierto es que solo resta que en los próximos días le informen cuánto deberá permanecer preso por haber golpeado al hombre que sufrió una lesión cerebral, luego de que lo empujara salvajemente acabando con su vida.
En las redes sociales muchos han llegado a comentar que lo de Pablo Lyle solo sucede en la ficción. A más de uno le ha costado creer cómo se han ido sucediendo las cosas. Y más allá de la gravedad del asunto lo que pasó sigue pareciendo el guion de una novela con trágico final. Hay una actriz que ya llevó a la pantalla chica una historia bastante similar.
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Se trata de Victoria Ruffo a quien le tocó interpretar un caso muy parecido para uno de sus personajes televisivos. Fue en el 2005 cuando a la ex de Eugenio Derbez le tocó el papel de una mujer que, en su caso y a diferencia del de Pablo Lyle, pasó 20 años en la cárcel por error. En la puesta en escena era evidente que había sido incriminada a propósito, sin embargo nadie la salvó de quedar detenida por dos décadas.
La producción en cuestión es “La Madrastra”. En esa novela Victoria Ruffo supo personificar a la perfección el dolor por haber sido enviada a la cárcel por un delito que no había cometido. Su personaje de ficción debió hasta soportar que sus propios hijos no la trataran como su madre y la llamaran madrasta luego de tantos años de ausencia. Si bien hay bastantes diferencias en cuanto a la culpabilidad con el caso de Pablo Lyle ha sido imposible no comparar la ficción con la realidad, en el sentido de cómo se puede acabar con toda una familia luego de pasar por la cárcel.