Desde México, donde radica desde hace casi dos décadas, la actriz Siouzana Melikián ha enviado por medio de diversas asociaciones ayuda para niños e inmigrantes en , país atacado por Rusia, porque ahora más que nunca, siente su nacionalismo.

"Si me preguntan dónde está mi casa, yo digo que está en Ucrania", dice la actriz de “SOS me estoy enamorando” y “Morgana”, quien ahí nació hace más de 30 años, cuando aún existía la Unión Soviética (URSS).

Donetsk, donde vio la primera luz, era entonces un pueblo de campo que ni siquiera estaba pavimentado y al cual regresaba desde Moscú cada que sus padres emprendían giras con el circo donde trabajaban.

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Hoy, las escenas y fotografías que ve de ese lugar, donde hay amigos de su papá, le dan tristeza y enojo porque están dañando a la población civil.

"El otro día vi fotos de un encubierto ucraniano que muestra cómo los rusos agarraron edificios y pusieron sus bases militares, las entradas están cubiertas y no se puede entrar al país directo sino dar la vuelta por Rusia, había un McDonalds que era inversión extranjera y lo cambiaron por una copia", dice.

"Tengo tíos en Ucrania, pero ellos viven en el campo y vieron cómo pasaron los tanques porque ahí no hay nada que atacar, sólo hay vacas. Mi papá tiene amigos de la infancia en Donetsk que desde 2014 es separatista, literal hay una división entre quienes viven del lado proruso y los ucranianos", detalla.

Siouzana, cuya mamá es de Armenia, creció hasta los 10 años básicamente en la capital rusa, donde sentía racismo.

"Había tanto que mis papás me metieron a un colegio de Moscú que era de niños armenios, azerbaiyanos, de todos los lugares que en su momento se unieron o unieron al imperio ruso, siento también que mis papás vivían un tipo de bulliyng ", comenta.

La familia Melikian fue una de las que emigró de la URSS ante la falta de apoyo a los artistas, llegando a México, donde Siuzana creció.

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Cuando decidieron salir, había recortes económicos a la cultura y devaluación de la moneda . En su primer periodo ministerial (1999-2008), ya como Rusia, Vladimir Putin llegó de cierta forma a reestructurar.

Pero también entró en conflicto con Chechenia, una de las repúblicas rusas a la que destrozó militarmente.

"Con Putin regresó esta cosa como imperialismo , a los chechenos los masacraron y él ha puesto a todos en puestos importantes y poderosos, encierra a la gente que no está de acuerdo con él, controla a los medios. Hay una generación que crece con él pensándolo héroe, le regresó la religión a Rusia que ahora es una intermediaria entre los zares y la gran Rusia", considera.

"Ahora están diciendo que están liberando a Ucrania, no es cierto, la gente está sufriendo, llora y la verdad el presidente ucraniano se está fajando, saliendo a pelear", apunta.

Tan pronto pueda, Siouzana cambiará su pasaporte, aún con la identidad soviética , por uno ucraniano, dónde está su casa.

"La gente que quiera donar que lo haga a través de ONG's, en Facebook ponen direcciones, yo lo hago, eso da confianza y si llega ayuda", subraya.