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Antes de que Stanley Kubrick se convirtiera en el mítico cineasta que fue, los realizadores no tenían control total de sus filmes.
Él fue uno de los primeros cineastas que consiguió ser director, guionista, productor y, en ocasiones, hasta fotógrafo de sus películas, y esto le permitió al neoyorquino pasar de un género a otro en sus más de cuatro décadas de carrera y también que Stanley, quien nació el 26 de julio de 1928, nunca hiciera un filme igual a otro.
En su carrera pasó de realizar filmes históricos (Spartaco, Barry Lyndon) a los bélicos (Fear and Desire o Dr. Strangelove) y más tarde a los dramas (Lolita) sin olvidarse de la ciencia ficción (2001: Odisea del espacio) o el terror (El resplandor) para finalmente terminar con un drama conspiracionista (Ojos bien cerrados ).
Kubrick inspiró a directores como Martin Scorsese, Steven Spielberg, James Cameron, Woody Allen, Terry Gilliam, los hermanos Coen, Ridley Scott, Christopher Nolan y George A. Romero. Incluso, Orson Welles comentó: “Entre los que yo llamaría ‘la generación joven’, Kubrick me parece un gigante”.
Kubrick hasta la fecha ha sido de los pocos cineastas que ha logrado un equilibrio entre crítica y taquilla, al hacer que sus filmes fueran amados por los críticos y, a su vez, le favorecieran en la recaudación en su corrida comercial en taquilla.
Es hasta ahora 2001: 0disea del espacio su filme más taquillero al haber recaudado hasta el momento más de 403 millones de dólares (ajustado a la inflación de la época).
En México Kubrick tiene una base de fans que cada año crece y que hace que, cuando algo sobre el cineasta de Naranja mecánica se presente, sea consumido inmediatamente.
En 2015 llegó por primera vez al país Stanley Kubrick: La exposición, la cual previamente ya había visitado lugares como Brasil, Estados Unidos, Canadá, Holanda y Reino Unido. Tras cuatro meses de presentarse en El Museo de Arte Contemporáneo (MARCO) de Monterrey, la exhibición fue vista por más de 90 mil asistentes que para una ciudad con 1.1 millones de habitantes equivale a que la muestra fue vista por uno de cada 11 habitantes en la ciudad el norte del país.
Casi dos años después, en noviembre de 2016, La Cineteca de la Ciudad de México abrió sus puertas para presentar la misma exposición que reunía 823 piezas de toda su filmografía.
En los ocho meses que la exposición se presentó al sur de la capital fue vista por 155 mil personas.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Alejandro Pelayo, director de la Cineteca Nacional explicó que ha sido la segunda exposición más vista en el recinto que el preside, tan sólo debajo de la de México y Walt Disney: Un encuentro mágico.
“Cuando trajimos la exposición pensábamos que congregaría a unos 100 mil asistentes pero al final logramos tener más de 155 mil, rebasó todo lo que teníamos en mente, eso lo único que demuestra es que Kubrick sigue más vigente que nunca y que, aún más importante, hay nuevas generaciones que están interesadas en él”, añadió.