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Eugenio Derbez es uno de los referentes de la comedia en México y, con toda la experiencia que tiene en los programas de este género, confiesa que no regresa a México a hacer proyectos de este corte porque no existen buenos libretos.
“No debo y no tengo que juzgar a nadie que hace comedia actualmente porque sé lo difícil que eso es. Para mí, quien tiene el valor de pararse en un escenario y contar un chiste para hacer reír tiene todo mi respeto, pero sí siento que antes hacíamos comedia de más calidad, una comedia mucho más armada, mucho más pensada, siento que hoy; ya no se hace y ya hay pura improvisación”.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Derbez comenta que la comedia mexicana está pasando por un momento complicado, el cual sólo cambiará hasta que se decida a apostar por la comedia con contenido; de lo contrario, aunque existan buenos comediantes, sin buenos argumentos de calidad y buenos escritores, seguirá estancada.
“Si me preguntan por qué no regreso a la tele es porque no hay buenos libretos. Afortunadamente yo escribo pero no me da tiempo de hacer todo. Como escritor me tardo mi tiempo. Hay otros que no saben escribir y están a expensas de encontrar un buen libreto. Tienes casos como el de Omar Chaparro, que es un excelente comediante pero está a expensas de que le caiga un buen o mal libreto”.
Pese a todo, Derbez, quien este fin de semana estrenó la cinta animada El Grinch, confía en que los comediantes que actualmente están en pantalla y llevan unas décadas en el entretenimiento continúen siendo una fuente de inspiración para nuevas generaciones que ven en ellos un modelo a seguir.
“Antes había una generación de grandes comediantes que tenían una gran preparación y oficio detrás, Héctor Suárez, Mauricio Herrera, Héctor Lechuga, Chucho Salinas, crecí viendo a todos ellos, eran unos monstruos de la comedia y después hubo un bache. Aún tenemos comediantes, Víctor Trujill o, Omar Chaparro, Andrés Bustamantes”.