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Luego de dos años sin dar conciertos, Julio Iglesias eligió en septiembre pasado una curiosa locación para reencontrarse con su público: Uzbekistán.
El país asiático fue el primero en recibir la gira con la que el madrileño celebra sus 50 años de trayectoria y que lo traerá a la Ciudad de México el miércoles próximo.
Notas de medios locales de los lugares en los que se ha presentado reportan que la atracción entre Iglesias y su público sigue intacta, más allá de ciertas complicaciones que ha habido durante los conciertos, como defectos de sonido o problemas de voz y movilidad que parecieran afectar a ratos al intérprete de “La vida sigue igual”.
Pese a los rumores sobre su salud, recientemente aclaró que en su rutina diaria destina varias horas a ponerse en forma nadando y preocupándose por su alimentación y su calidad de sueño, algo que contó a EL UNIVERSAL hace unos meses, incluso, a modo de mefáfora.
“No me veo como un músico en extinción, ni como un sobreviviente, no me veo así, yo aún no he llegado a ninguna playa, sino nadando; creo que no he parado de nadar y no creo hacerlo, para mi nadar en esto es descubrir cosas nuevas y sí, entiendo que gente joven maravillosa esté intentando otras cosas y trato de aprender de ella”.
En cuanto al repertorio que ha presentado, Iglesias ha repasado sus grandes éxitos.
Canciones como “Amor, amor, amor”, “Échame a mí la culpa”, “Hey” y “Can’t help falling in love” han sido parte de la lista que ha interpretado.
Es un artista clásico, de los que interpretan bolero, balada y mariachi, pero nada tiene contra algunos géneros nuevos como el reggaetón, al que se ha acercado recientemente su hijo, Enrique.
“Me puedo emocionar escuchando a (Sebastian) Bach, a quien es cucho desde hace 50 años, de la misma manera que me emociona escuchar “Despacito” (de Luis Fonsi), porque me parece que es una canción universal, quiere decir que yo no tengo envidia de la gente joven y me encanta estar con ellos, por eso en mi nuevo disco invité a muchos de ellos”.
Serie biográfica y demanda. Aunque haya estado alejado de las presentaciones públicas, Iglesias ha sido noticia por otros motivos en el último tiempo. En mayo de 2018 Disney anunció que trabaja en una serie sobre su vida, luego de adquirir los derechos del libro Secretos confesables, que escribió su exmánager Antonio Fraile.
Además, enfrenta una demanda de paternidad interpuesta por un hombre de 42 años, hijo de la bailarina portuguesa María Edite Santos, quien dice que Iglesias, que se negó a hacerse un examen de ADN, es su padre. Luego de México, Iglesias prevé continuar su tour Europa.
