El cantante Juanes, junto a un grupo de artistas, celebró con un concierto privado el aniversario número 12 de su fundación Mi Sangre , que tiene su sede en la ciudad de Medellín y cuya misión principal es construir cultura de paz.
“Hace 12 años empezamos este sueño. Nunca me imaginé que fuera a ser tan grande y poderoso, y que fuera parte de la transformación que todos soñamos. Gracias a todas las personas que han confiado en nuestro trabajo a lo largo de todos estos años”, dijo Juanes.
En un mismo escenario en Medellín, compartiendo letras, historias y una misma causa, se reunieron Juanes, Fonseca, Mike Bahia, Greeicy Rendón, Pasabordo, Diamante Eléctrico, Trapical Minds, Pipe Ospina, Jke de Crew Peligrosos y el comediante Adrián Parada.
Todos estos artistas donaron su talento y su música a la labor de la Fundación Mi Sangre, una organización que ya “ha llegado a más de un millón 300 participantes, y que con metodologías innovadoras trabaja por la construcción de una cultura de paz en el país”.
El evento fue la excusa perfecta para reunir amigos, aliados y organizaciones que se sumaron a esta recaudación de fondos para seguir el camino de la Fundación y, por supuesto, ser también autores del cambio que lidera la organización en los municipios y departamentos de Colombia.
Al concierto privado asistieron 350 personas y se vincularon “empresas como MasterCard, Grupo Sura, Unidos en Red, Distrihogar, Constructora Capital, Grupo Argos, Protección, El Colombiano, Intelecto, Latam, Warner Chappell Music, Compañía de Empaques, Orbis, Movich Hotels, Postobón,Chivas Extra, Zona E, Grupo Éxito, Huevos&Escobas y Grupo Trébol Comunicaciones".
Todas estas donaciones aportarán a la continuidad y sostenibilidad de los proyectos de Mi Sangre, pero sobre todo, este encuentro permitió “inspirar, contagiar y tejer nuevas redes, nuevas alianzas y amistades, y así seguir construyendo ese sueño que nos guía”, señaló Catalina Cock, directora ejecutiva de la fundación que ha estado al frente desde hace 10 años.
“Vienen grandes retos para la Fundación Mi Sangre , de expansión y crecimiento, pero sobretodo con un foco en el tejido de redes y ecosistemas para que las nuevas generaciones puedan ser protagonistas en la construcción de una cultura de paz”, concluyó Catalina.
Fundación Mi Sangre
es una organización que “incide en la realidad actual del país, y lo hace a través de sus mismos participantes: niños, niñas y jóvenes que fortalecen sus habilidades para la vida y se convierten en agentes del cambio”.