El tuvo su primera edición en 1998, en ese entonces, daba espacio únicamente a bandas y músicos de rock pero, con el tiempo, su dinámica fue evolucionando y hoy, como un híbrido musical, ofrece a sus asistentes propuestas que van desde los sonidos más nuevos hasta aquellos que inundaban el lineup de antaño, en que el público pagaba menos de 200 pesos por acceder al evento; 25 años después, los boletos oscilan en más de los 3 mil pesos.

Ayer se dio a conocer el cartel de la vigésima quinta edición del Vive Latino, el cual tenía expectantes a sus más asiduos asistentes, debido a que el evento prometía ofrecer muchas sorpresas, debido a que cumple su primer cuarto de siglo.

Satisfechos, varios usuarios de las redes sociales, aplaudieron el line up que incluirá una larga lista de bandas, músicas y músicos de rock, como solía suceder tiempo atrás, cuando el festival había sido concebido como plataforma para el género.

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Molotov, Caifanes, Aterciopelados, División Minúscula, Duncan Dhu, El gran silencio, El Haragán y compañía, Jay de la Cueva, Little Jesus, La Lupita, Los Concorde, Los Planetas, Motel, Meme del Real, Porter y Siddharta son algunos de los exponentes del género que se darán cita en el escenario del Estadio GNP Seguros el 15 y 16 de marzo del próximo año.

Aunque los fans del evento están entusiasmados con el evento, no han dejado pasar desapercibido que, este año, parece que los precios de los boletos serán más altos de lo que esperaban, pues ya circula una imagen en la que se sugiere que tendrán precios que fluctúan entre los 4 mil 697, 4 mil 880 y 6 mil 588, dependiendo del tipo de abono en el que estén interesados.

Y, si bien, el Vive se ha convertido en uno de los festivales mexicanos más costosos, cuando se creó tenía precios muy accesibles.

En 1998, año en que se celebró su primera edición, en la que se presentaron bandas como Illya Kuryaki and the Valderramas, Control Machete, Café Tacuba, Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio y Santa Sabina, costó sólo 180 pesos.

En 1999 no se llevó a cabo y, para el 2000, ya había aumentado a 230 pesos, en 2002 tampoco se realizó, pero durante el 2001, 2003, 2004 y 2005 los boletos costaron 280 pesos.

En 2006, Ocesa agregó cargo al precio de las entradas, que costaron 480, en 2007 tuvieron un costo de 500; en 2008 de 540 y 2009 de 640.

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En lo que respecta al 2010 costaron mil 297 pesos, en 2011 y 2012 los precios se mantuvieron en mil 200 pesos.

2013; mil 350 pesos, 2014; mil 800 pesos, 2015; mil 449 pesos; 2016; mil 306 pesos.

En 2017, los boletos tuvieron un precio de mil 880 pesos, mientras que en 2018 estuvieron en 2 mil 50 pesos.

El próximo año, en 2019, costaron 2 mil 200 pesos y en 2020, 2 mil 760.

En 2021 no se llevó a cabo por la pandemia y, en su regreso, durante 2022, las entradas conservaron su precio de 2 mil 760, pero aumentaron en 2023 a 3 mil 800 pesos, mientras que en 2024 costaron a 3 mil 281.

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melc



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