era una actriz dúctil que, así fuera productora de la emisión que se estuviera haciendo, jamás se comportaba de manera grosera.

“Trabajar con ella es de absoluta libertad, teníamos una relación respetuosa y dirigirla era una delicia, siempre se comportó de manera profesional, nunca llegaba tarde y nunca se iba antes, traía una escuela diferente, entregada y amorosa”, recuerda el .

Ambos trabajaron juntos por varios años, ya fuera en el unitario “Mujer… casos de la vida real”, la telenovela “Mi marido tiene más familia” y la cinta “Tercera llamada”, además de teatro.

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“Era alguien que tenía una fuerza vital muy particular y si se enojaba lo hacía de manera entretenida; ella tenía una chispa especial, una manera de ver la vida peculiar, nada la detenía, siempre le daba la vuelta a los problemas por un lado humorístico”, apunta Franco.

El realizador subraya que la actriz siempre fue alguien que se subía a las cosas que valían la pena y donde se divertía. Así fue en la obra “Amor dolor”, en la que compartió créditos con Diana Bracho.

“Se aventaba un super baile ahí maravilloso, estaba fantástica con una calidad humana, para mi siempre fue alguien muy cercano a mi vida”, expresa.

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melc

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