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”...y estamos en el último minuto, 48 segundos, 47 segundos y el segundero de esta imagen parece medir los latidos del corazón de la humanidad y parece también que salen sobrando las palabras y la descripción”, así fue como el periodista Jacobo Zabludovsky narró cada momento en torno a la llegada del Apolo XI a la Luna.
En México era de noche.
De acuerdo con la narración el cohete alunizó a las 20:56 horas del 20 de julio de 1969; el periodista formaba parte del equipo encargado de transmitir el suceso por Canal 2. Desde cuatro días antes, el 16 de julio, Zabludovsky junto a Miguel Alemán Velasco y Ken Smith habían llevado a los mexicanos todos los detalles del lanzamiento hasta el tan esperado momento.
“7 segundos, 6 segundos, 5, 4, 3, 2... Señoras y señores el hombres ha llegado a la Luna”, narra un emocionado Zabludovsky.
Cobertura nacional
Para la industria mexicana también fue un momento histórico al que todos se querían sumar.
“No deje solos a los astronautas”, rezaba uno de los anuncios de la XEX La voz de México publicado en EL UNIVERSAL, que hace 50 años invitaba al público a seguir el acontecimiento. Ya sea por televisión, radio o periódico, la llegada del hombre a la Luna tendría un seguimiento minuto a minuto.
Personajes como Mario Moreno Cantinflas fueron parte de la cobertura que el Canal 8, que formaba parte de Televisión Independiente de México, realizó de manera ininterrumpida. De acuerdo con este diario, para esta nueva faceta como comentarista, el comediante contó con la dirección escénica de José Solé; se trató de una de las primeras apariciones de un Cantinflas en un papel más formal.
A ellos se sumaron Telesistema Mexicano que transmitió desde Cabo Kennedy, la XEW La voz de América Latina desde México y las estaciones del grupo ACIR, entre otros.
“Sin dudar, la fecha de ayer domingo 20 de julio fue histórica para la industria de la radiodifusión y televisión de nuestro país”, puede leerse en la edición del 21 de julio de 1969 de EL UNIVERSAL donde se detalla el esfuerzo de cada medio de comunicación mexicano situándolos “a la altura” de los mejores del mundo. Un día antes, este periódico había realizado una edición extraordinaria en la que en grandes letras se leía “Alunizaron”.