El único wookiee existente en Star Wars dejó de respirar, Peter Mayhew, quien diera vida a Chewbacca en la zaga creada por George Lucas murió el 30 de abril a los 74 años y en su casa al norte de Texas.
Así lo anunció la familia de Mayhew vía Twitter, donde escribieron que el mejor amigo de Han Solo (Harrison Ford) estuvo acompañado por sus seres queridos.
”La familia de Peter Mayhew, con profundo amor y tristeza, lamenta compartir la noticia de que Peter ha fallecido. Nos dejó la noche del 30 de abril de 2019 con su familia a su lado en su casa del norte de Texas”, escribieron.
Peter Mayhew trabajaba como asistente en el Hospital King’s College en Londres (1976) cuando el productor de cine Charles Schneer lo encontró y lo contrató gracias a su gran estatura 2.21 metros para hacer la cinta Simbad y el ojo del tigre.
El actor se puso el disfraz nuevamente en Star wars: Episode III - Revenge of the Sith y en Star wars: Episodio VII - El despertar de la fuerza, estrenada en diciembre de 2015.
Star Wars lo era todo. Los familiares del histrión fallecido destacaron que Mayhew trabajó sin descanso para superar sus problemas de movilidad y poder meterse de nuevo en la piel de Chewbacca en el Episodio VII, pero ya no pudo actuar en la última película Star Wars: Episodio VIII - Los últimos Jedi, debido a sus problemas de salud.
“Para él, la familia de Star Wars significaba mucho más que tan sólo un personaje en una película”, expresaron sus parientes.
Mayhew recorrió durante muchísimos años las conferencias de fans y encuentros de seguidores en todo el mundo hasta convertirse en uno de los artistas más queridos de la famosa saga.
En 2015, el actor contó lo especial que fue para él reencontrarse con Harrison Ford en un plató durante el rodaje de Star wars: Episode VII - The force awakens y definió su estrecha relación fuera de la pantalla como la de “un matrimonio”.
“Estaba sentado en mi caravana. Llamaron a la puerta y alguien gritó '¿Dónde está esa alfombra andante?”, dijo a la revista Empire.
“Era Harrison. Entró, me dio un gran abrazo y me dijo: ‘Bienvenido de nuevo’”.
La película, que marcó el regreso del universo de Star Wars a la pantalla grande, superó los 2 mil millones de dólares en recaudación.