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La llegada de Desafío sobre fuego Latinoamérica significó el rescate del arte de la forja en países como México, consideran los integrantes del show.
El programa, basado en el americano Forged in fire, presenta a un grupo de concursantes que compiten forjando diferentes cuchillos históricos.
La tercera temporada está próxima a estrenarse en 2020 por History. La apuesta será continuar en esa línea y que más mujeres participen.
“Es muy importante la parte de los artistas que han estado surgiendo. Aquí en México que no hay tanto esa cultura como en otros países de Latinoamérica hemos descubierto gente maravillosa que estaba por ahí en el anonimato haciendo arte con las manos”, comenta el juez mexicano Antonio de Regil.
“La gente se está atreviendo y ojalá que salgan más mujeres que lo hagan”, reitera.
El conductor Juan Pablo Llano asegura que los artesanos han salido hasta “de debajo de las piedras”, de ahí que además de una nueva versión latinoamericana también se prepare una exclusivamente brasileña.
Explica que cada vez más forjadores se están preparando tomando clases e, incluso, los mismos exparticipantes están abriendo escuelas.
“El participante colombiano que tuvimos en la segunda temporada lo hace muy rústicamente, es herrero de profesión pero aprendió a hacer cuchillos viendo videos de nuestro jurado Mariano Gugliotta”, cuenta Pablo.
“Hoy por hoy tiene una escuela de forja; está enseñando a jóvenes en su ciudad Santa Marta, fue invitado a Perú a dar charlas. Eso es cambiarle también la vida a una persona que tal vez no fue el ganador pero imagínense todo lo que ganó. Estamos impactando vidas y eso es algo positivo”.
Con el show, los expertos esperan seguir enseñando parte de la historia de los cuchillos y que éstos sean vistos más como armas, una herramienta y cultura.
