aridiana.banos@eluniversal.com.mx
“Estaba ya agotado, fastidiado, perdido, porque no encontraba aliciente suficiente para estar haciendo mi trabajo. Fui muy tonto porque no reconocí todo lo que había logrado, estaba en la cima, me empecé a quedar solo y eso trajo como consecuencia mi comportamiento”, explicó en entrevista el locutor Toño Esquinca sobre lo que vivió hace un par de meses, cuando criticó al entonces candidato Andrés Manuel López Obrador y sus propuestas, y amenazó con irse del país si ganaba la elección, por lo que fue suspendido por Radio Centro.
Esquinca se disculpó, dijo que tenía un problema con el alcohol y se ausentó del programa. Ayer, tras haber regresado a la radio, explicó que nada justifica que haya entrado a la cabina de radio en estado inconveniente y que haya hecho sus polémicos comentarios sobre AMLO, pero toma ese hecho y sus consecuencias como una señal para revalorar lo que tenía, hacer un alto y volver a comenzar.
“Estoy muy agradecido con Dios por la oportunidad de seguir teniendo trabajo y, la verdad, fue una experiencia difícil, pero hay que darle de frente al trabajo, como dije, empiezo de cero. Afortunadamente me pasó esto y estuve aislado 50 días, porque a lo mejor hubiera sido peor lo que viniera conmigo y mi carrera”.
Al comenzar su emisión, el locutor se disculpó ante su audiencia y rectificó sus dichos sobre el virtual presidente electo. Este cambio, explicó, se debió a que tuvo tiempo suficiente para reflexionar.
“Me sentí contento de que el país, o al menos así se manifestó en las votaciones, logró lo que quería, entonces le tuve que entrar. Le dije ‘mi presidente’ porque siempre he sido respetuoso con los presidentes en turno; como lo dije (ayer) en la mañana, mis padres me enseñaron a respetar a la autoridad. Va a ser mi presidente como mexicano y lo tengo que respetar, aunque no comulgue con él en muchas cosas”, dijo a EL UNIVERSAL.
Sus detractores no le preocupan porque, aseguró, no busca agradarle a todos, pero ve positivo que a través de ellos pueda conocer lo que gusta y lo que no.
“Me quiero enforcar en los que han estado conmigo siempre, que aguantaron burlas y ataques, y aún así se mantuvieron y no hicieron caso de muchas cosas, como que le tiraba café caliente a mis colaboradores o que tenía que ver con drogas; acepté mi problema de alcohol públicamente pero me inventaron mil cosas más”.
El titular del programa Toño Esquinca y la muchedumbre aseguró que sus superiores en Grupo Radio Centro, más que darle un ultimátum para que se sometiera a rehabilitación, le dieron todo el apoyo.
“Accedieron a apoyarme y darme el tiempo para que pudiera rehabilitarme. Hubo obligación de mi parte de entregar el certificado de mi rehabilitación y estoy muy agradecido”.
Toño descartó irse de México, como lo había dicho si ganaba AMLO.
“No me puedo ir y no me quiero ir. Lo pensé, lo busqué y lo dije, pero recapacité y honestamente no, creo que no es un aspecto de valentía abandonar el barco sino estar en él”.