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Jennifer Lawrence es una decidida partidaria y promotora de movimientos como #MeeToo y Time´s up, los cuales piden un alto al abusos hacia la mujer.
Eso no significa que la joven de 27 años tenga que dejar su parte feminina o necesite esconder su escultural figura para mostrar su apoyo a los movimientos en pro de su género, es más Lawrence está a favor de usar la belleza y la seducción de la que gozan.
Hace unos días Jennifer fue criticada por usar un ajustado y revelador vestido, mientras sus compañeros (hombres) de reparto estaban muy bien abrigados.
Hubo quien dijo que era una muestra más de discriminación y objetivación de la mujer.
Jennifer no se quedó callada y contestó en sus redes que nadie la obligó y que lo había usado porque quería y se sentia cómoda en él.
Ahora la actriz ahonda en el tema y asegura que la razón por la que fue críticada le parece absurda y que la razón por la que fue atacada se debe sencillamente a que es famosa.
“Realmente abusaron de mi nombre, eso no era lo importante y creo que quisieron hacer una controversia con mi nombre porque soy famosa y eso es tonto”, explicó la ganadora del Oscar a medios mexicanos en una videoconferencia desde Londres.
Al recordar el incidente, Jennifer señaló que contestó tras la controversia, ya que no quería que el movimiento que sigue junto a otras actrices en Hollywood se desvirtuara.
“Lo que pasó el otro día fue basicamente un abuso de como se manejan las redes sociales. Básicamente usaron mi nombre de una manera en la que muchos followers hicieron daño con sus comentarios y quisieron lograr una distracción de lo que verdaderamente representa un movimiento y un problema real, soy adulta y puedo vestirme como quiera”, detalló.
Al escuchar a Lawrence, se escucha a una mujer segura y confiada con decisiones y el camino que ha tomado. Una mujer que puede ser inteligente y defender un movimiento sin tener que sacrificar su belleza.
En el largometraje, la originaria de Kentucky tiene un desnudo frontal, algo que al inicio, señaló, fue complicado para ella, pero que tras terminar de filmar descubrió que había adquirido una fuerza y confianza en sí misma.
“Esta película me dio mucha confianza en mí, antes de la película quizá era una persona con ciertas inseguridades y esta película me ayudó a sentirme más libre a amar mi cuerpo, estoy muy feliz con haberla hecho. La verdad es que no fue tan malo como imaginaba (hacer la escena del desnudo”, dijo.
No sólo Jennifer sabe del poder de su belleza y su talento, también Francis Lawrence, —director de Operación Red Sparrow que llegará a la cartelera nacional la próxima semana— lo reconoce.
Esa —dijo Francis— fue una de las razones por las que el cineasta quiso que la rubia trabajara de nueva cuenta con él, luego de su exitosa mancuerna en la trilogía de Los Juegos del Hambre, la cual finalizó en 2015.
“Me gusta jugar con la idea de que la gente piense que esta película de espionaje habla sobre el poder de la seducción, cuando en realidad habla sobre lo que hay detrás de la seducción, que no es otra cosa más que de la inteligencia de la mujer”, confesó Francis en la misma videoconferencia.