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aridiana.banos@eluniversal.com.mx
En Europa actualmente coincide una generación de niños que renovará la realeza en unos cuantos años y que desde ahora ha comenzado a imponer un cierto estilo en la moda y en la forma en que se presenta a sus súbditos.
Apenas la semana pasada tocó a Leonor de Todos los Santos de Borbón y Ortiz, de 12 años e hija de los reyes de España, Felipe VI y Letizia, erigirse como la pequeña princesa de Asturias.
Laura Pérez Cisneros, comentarista de asuntos internacionales y experta en temas de la realeza explica que no había ocasión más oportuna para que la niña comenzara su vida pública como miembro real. ¿Razones? El rey emérito Juan Carlos cumplió 80 años, el actual monarca Felipe VI llegó al medio siglo de vida, Asturias está cumpliendo mil 300 años y la patrona de la región, la Virgen de la Covadonga cumple 100 años.
“Realmente el arranque de Leonor como futura reina de España fue en enero con la entrega del Toisón de Oro, donde su padre le habló de todas las responsabilidades que va a tener como la futura monarca y las exigencias que le va implicar esto”, considera la también periodista.
“A partir de este momento ya va a tener una agenda propia, pero al final sigue siendo una niña. Letizia y Felipe han sido muy cuidadosos en que la princesa Leonor como la infanta Sofía tengan una niñez lo más normal posible”, agrega.
Pérez Cisneros detalla que este verano mandaron a ambas a un campamento en EU, para que convivieran con niños de otros países y sobre todo aprendieran el inglés.
“Y hacerlas unas royals muy terrenales”, comenta
Aun así, destaca, a Leonor le espera un preparación muy rígida, comenzando por su formación en los tres ejércitos, Academia General Militar (Zaragoza), en la Escuela Naval Militar (Marín) y en la Academia General del Aire (San Javier).
Es posible, dice, que después de la secundaria sea enviada a EU para continuar sus estudios hasta la Universidad, aunque tendrá libertad de elegir la carrera a estudiar.
“Va tener que empezar a aprender ahora sí de una forma más formal el euskera, el gallego y el catalán porque, si va a ser la reina de todos los españoles, tiene que saberlos.
“Lógicamente también toda la cuestión protocolaria, al final tanto Leonor como Sofía nacieron siendo royals y ellas saben un poco más todas las cuestiones de protocolo”, expresa Pérez Cisneros.
El futuro. Aunque aún es niña, a Leonor se le debe comenzar a hablar como alteza real y señora.
Sus apariciones serán más frecuentes, ya que hasta el momento únicamente lo hacía en ocasiones muy puntuales, como el desfile de la Fiesta Nacional, la Misa de Pascua en Palma de Mallorca y la reunión que la Familia Real organiza con la prensa en su estancia isleña.
“La infanta Sofía tendrá la oportunidad de hacer cosas como más comunes, lógicamente cuando crezca va a presidir ciertos eventos, pero van a ser mucho más importantes y de más peso, sobre todo políticos”, indica la especialista.
Y hay una amplia posibilidad de que Leonor de Borbón encabece, durante octubre, la ceremonia de los premios Princesa de Asturias, que llevan ese nombre desde 2014 cuando Felipe VI asumió la corona.
Eso sí, apunta, la cuidarán de cuestiones polémicas, como lo sucedido en la misa de Pascua en el mes de abril, cuando quitó el brazo de su abuela la reina emérita doña Sofía de su hombro.
“Marcará el inicio de una nueva generación de royals a lo largo del mundo”, finaliza Pérez Cisneros.
