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Pablo Lyle
irá a nuevo juicio, pero ahora con un jurado frente a él y es que hoy un juez negó los argumentos de defensa propia con los que los abogados del actor trataban de librarlo de los cargos de homicidio involuntario.
El magistrado estadounidense
también mantuvo el arresto domiciliario y tendrá que manter un grillete en sus tobillo para que lo estén monitoreando. El histrión de "Mirreyes vs. Godínez" se encuentra en casa de su cuñado de donde no podrá salir.
El pasado 31 de marzo en el Aeropuerto de Miami fue detenido Pablo Lyle luego de que golpeara a un hombre de 63 años y de origen cubano llamado Juan Ricardo Hernández, quien quedó inconsciente, tras el enfrentamiento durante un accidente de tránsito.
El isleño falleció el 4 de abril en el nosocomio al que fue llevado en aquella ciudad del estado de Florida en Estados Unidos.
En mayo,
Lyle se declaró no culpable
del cargo de homicidio involuntario del que la Fiscalía de Miami-Dade lo acusó formalmente. El 6 de junio,, el juez Alan Fine negó al actor la petición de regresar a México y modificó las condiciones de su arresto domiciliario.
Ayer se dijo que la defensa de Lyle llevaría un testigo para que lo ayudara en la reconstrucción de los hechos y hablara sobre la probabilidad de que la víctima regresó a su auto para buscar un arma, por lo cual el mexicano reaccionó.
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