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jose.montoya@eluniversal.com.mx
Víctor Trujillo negó ayer que regrese a Azteca, al menos directamente. Esto, luego de que en su cuenta de Twitter anunciara un día antes que su programa Informe Brozo comenzaría a transmitirse por Azteca América, filial de la televisora del Ajusco en Estados Unidos.
“La verdad es que no sé quién lo dijo pero quien lo dice no sabe muy bien cómo está la cuestión. Ayer cumplimos 100 programas por AcustikTv entonces vamos a seguir haciendo el programa para Acustik Tv aquí en México para Total Play, para Izzi, para Facebook Live, el streaming desde luego, pero a partir de ayer (antier) empezamos la retransmisión por Azteca América”, explicó.
Esto no significa, aseguró, que planee trabajar de nuevo con la televisora de Ricardo Salinas Pliego, de la que salió hace 16 años.
“Es el mismo programa nada más que se va a Azteca América, que no tiene nada que ver con TV Azteca”, dijo Trujillo, quien descartó tener acercamientos con la televisora.
“Nosotros lo quisimos anunciar con toda precisión pero vez cómo salió”, dijo riendo.
De igual forma, comentó que este año no irá al Mundial de Rusia, como lo hizo la década pasada con Azteca y más tarde, en 2014, con Televisa desde Brasil.
“Tuve afortunadamente invitaciones y no, quiero darme un sueño que tuve hace años de poder ver el mundial desde la casa. También hubo la posibilidad (de ir con el Güiri-Güiri) y voy a quedarme en la casa a ver el mundial porque hace muchos años que no lo hago”.
Una película increíble. Trujillo prefirió centrarse también en el doblaje de Los Increíbles 2, que se estrena este viernes, 14 años después de la primera cinta.
Esa familia de superhéroes que buscaba entender su dinámica y derrotar un villano vuelve con una nueva trama, en donde la mujer cobra un papel protagónico, dejando al padre, que suele ser la cabeza del clan, viviendo y tratando de encontrar su lugar dentro de esta nueva ecuación.
Brozo da vida nuevamente a Bob Parr, el papá en esta familia animada. Volver a conectar con este personaje, reconoció, lo ayudó a imprimirle una parte vulnerable que pocos papeles le han dejado mostrar.
“Me dio mucho gusto encontrar esta película y la temática porque me vi reflejado en una parte de mi vida y eso me ayudó mucho a hacer este personaje en estas circunstancias, me dio orgullo usar mi parte más sensible y más vulnerable sin tener pena o tapujo sino al contrario, orgullo porque a mí me celebran el Día del Padre y el Día de la Madre, entonces son como mis trofeos de estar vivo; me encantó representar esta parte en esta circunstancia solidaria”.
Trujillo comentó que, al igual que Consuelo Duval, la historia permite curar heridas y reflexionar.
“Es cierto y vale la pena ver el gran espectáculo, pero (la película) va a enfrentarse a un gran termómetro y van a salir de la película sabiendo dónde andan, si andan bien, si algo les falta, un termómetro muy leal, muy noble pero no obstante un termómetro”.