erika.monroy@eluniversal.com.mx
Marcus Ornellas llegó hasta la Sierra Mixe de Oaxaca, a dos pueblos en la montaña en donde el temblor también dejó sin casas a los habitantes y medio incomunicados del exterior.
Ahí entregó de mano la ayuda que en los días anteriores había conseguido. Víveres, medicina, ropa. “Lo que más necesitan son medicinas, fue lo primero que me pidieron al llegar ahí”, contó el actor.
Después de pasar el sismo en familia junto Ariadne Díaz y su pequeño hijo Diego, la familia decidió ayudar a los voluntarios que estaban en los derrumbes de la ciudad. Consiguieron comida, agua y de su bolsa pagaron varios víveres.
De regreso a la capital de México, el actor, quien asegura sentirse de corazón mexicano, sigue ayudando en los centros de acopio y apoya a los brigadistas que aún siguen en las labores de remoción de escombros.
En el centro de acopio de Huerto Roma en Jalapa 234, el actor pasa cajas que van directo a un camión grande que tiene por destino Oaxaca.
El protagonista de telenovelas y de teatro está muy orgulloso de la forma en que las personas han reaccionado ante la adversidad. “Ha sido un despertar, una nueva forma de ver las cosas y que esto seguramente evitará que permitamos las mismas cosas de siempre. ¿Dónde han estado los políticos?, ¿dónde está toda esa gente? Creo que es momento de tomar mejores decisiones en conjunto”, dijo.
A esta idea se suscribe Ariadne Díaz, quien espera que los jóvenes sigan cuidando de su país y que así los gobernantes se den cuenta de que el pueblo ve las cosas de forma distinta después del temblor.
“Mi hijo es aún muy pequeño para entender todo lo que está pasando, pero definitivamente lo seguiremos criando para que él sea solidario como todos los mexicanos”, agregó Ornellas, quien presto a la ayuda corre por cajas, por bultos de ropa para que entre todos los voluntarios llenen un camión que lleva lo que muchos perdieron.