A lo largo de su vida, María Félix fue amante del lujo y de coleccionar lo que ella describía como “cosas caras”, entre ello, antigüedades, pinturas, muebles, ropa y su debilidad, según le contó en alguna ocasión a Verónica Castro; las joyas.
La casa de joyería favorita de La Doña era Cartier , quien le hizo algunas de las piezas más icónicas que la actriz usó en su vida pública y en algunas de sus películas.
Tras la muerte de Félix en abril de 2002 y luego de revelarse que dejó como principal heredero a su asistente Luis Martínez de Alba poco se supo del paradero de muchas de las posesiones de la estrella mexicana y de las que se ha sabido están en lugares alejados de México y en posesión de personalidades como Meryl Streep, Thalía o Monica Bellucci.
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La actriz estadounidense usó en 2007 durante la entrega del Oscar en la que competía por la película “El diablo viste a la moda”, una de las piezas más icónicas de la Doña, el collar "Escarabajo". Esta es una pieza de oro de 18 kilates, calcedonia, coral, onyx y diamantes, de origen francés.
La joya perteneció a María Félix y fue en 1996 que la subastó en Génova, Suiza, para posteriormente llegar a manos de Meryl. La joya se volvió a subastar en abril del 2010 como parte del lote "Always in Style: 150 years of Artistic Jewels" en Sotheby's New York, en un total de 28 mil 750 dólares.
Una de las joyas mas emblemáticas de María Félix era su collar de cocodrilos que la marca Cartier hizo en 1975 a pedido de la actriz mexicana. Esta pieza fue fabricada en oro y tiene dos cabujones de esmeralda y dos de rubí, como ojos, más de mil diamantes amarillos de fantasía y más de mil esmeraldas.
Tras la muerte de la actriz esta joya formó parte del archivo histórico de la joyería y es una de esas piezas únicas de valor incalculable; fue la casa de joyería quien prestó a Monica Bellucci esta icónica pieza para una alfombra roja de 2006 durante el Festival de Cine de Cannes.
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La actriz italiana quedó tan fascinada que 13 años después, durante el mismo festival francés, portó una nueva versión del collar de la actriz mexicana, sacado de una nueva colección que Cartier diseñó con María Félix como fuente de inspiración.
En agosto de 2018 la mexicana, quien siempre ha dicho ser fanática de La Doña (incluso asistió al funeral de María en 2002) mostró un collar perteneciente a la fallecida actriz.
La también cantante mostró durante una fiesta de pre cumpleaños el collar que perteneció a Félix y el cual compró hace algunos años en una subasta; por él pagó alrededor de ocho mil dólares (160 mil pesos). La pieza fue realizada en oro y pintado a mano por Antoine Tzapoff, la última pareja que María Félix tuvo.
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