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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
El papá de Luis Miguel se ha convertido en el villano de México por los abusos que cometió a su hijo (de los que ahora se sabe por la serie de Netflix del cantante) pero se debería extender la discusión a gente como Sergio Andrade, que explotó a varias niñas y se encuentra libre.
Esa es la conclusión de Vanessa Bauche, quien en la producción de Netflix sobre la vida de El Sol interpreta a quien fuera su jefa de prensa, Rosy Esquivel.
Andrade, al que nombra Bauche, fue un productor musical que abusó de menores como Gloria Trevi y Mary Boquitas.
“México odia a Luisito Rey y sí, dan ganas de pegarle, pero nadie se pregunta por qué Sergio Andrade está libre y dañó a niñas, las explotó en todos los sentidos, les destruyó la autoestima y abusó en todos los campos de la salud.
“Ahí es donde creo se deben poner la discusión y provoque o abra temas importantes en el abuso y explotación infantil”, dice Bauche.
En su opinión, el furor que ha provocado la serie al revelar ciertos secretos de la relación entre Luis Miguel y su padre no debería quedarse en generar solamente un escándalo sino que lo más saludable sería tomarlo como un ejemplo para alertar a la sociedad.
“Si no nos preguntamos más allá de los chismes de la serie, creo que se desvirtúa el propósito tanto de los autores como del propio protagonista, de visibilizar y concientizar a la gente de esto”, considera la actriz, cuyo personaje en la serie tiene especial relevancia justo en la época de los 80, cuando Luis Miguel trata de zafarse del yugo que le había impuesto su padre desde que era un niño de 11 años.
Por eso mismo, Bauche lamenta que una parte del público ataque, a través de las redes sociales, a sus compañeras Mariana Yazbek y Stephanie Salas.
Las dos, sin ser mencionadas por su nombre en la serie, pueden ser identificadas por ciertas características en algunos personajes.
Mariana fue el primer gran amor de Luismi y, según la narrativa de la serie, lo engañó con un cineasta al que tampoco se menciona por su nombre pero hace alusión a Alejandro González Iñárritu.
Salas aparece como una amante ocasional con la que el cantante se desahoga luego de enterarse del engaño de Mariana.
“No me ha gustado que se ensañen con ellas. No sé quiénes, pero deben entender que es una ficción a partir del protagonista, no un documental; ni son todos (los personajes) que están, ni están todos los que son, la anécdota se tiene que adaptar para que la historia progrese dramáticamente”, comenta.
Sin sorpresa. El papá de la actriz de Amores perros, quien era músico, y Luis Rey, se conocieron justo cuando Buache era pequeña.
Vanessa quería ver personalmente a Luis Miguel, al que ya admiraba, y hasta fueron a verlo al programa ochentero XETU.
“Después Luis Rey lo invitó a una comida y mi papá salió asustado de lo que escuchó de él mismo; no podía entender que un padre pudiera exponer a su hijo a tantas cosas, nada que ver con la niñez.
“Tenía yo unos 10 años y cuando regresó (de la comida) le pregunté que cuándo lo veíamos; me dijo que nunca iba a pasar eso y que no lo volviera a pedir porque Luis (Rey) no era una persona sana, sino ruín.
“Cuando leí el guión vi que muchas cosas, que ahora el público está conociendo, yo ya sabía; lo que sigue en la serie va a ser todavía más fuerte, estamos viendo una ecuación de la suma de tanta presión, carencia de un padre que, además de explotarlo, decía que la madre lo abandonó”, indica Bauche.
Hasta el momento Vanessa desconoce si habrá segunda temporada y será incluida en la misma.