El ex cantante principal del conocido grupo surcoreano de K-pop SHINee, Kim Jong-hyun, falleció ayer en un aparente caso de suicidio, según informó la policía.
Kim, de 27 años y más conocido por su nombre de pila, fue hallado inconsciente en un apartamento alquilado del barrio de Cheongdam, en el sur de Seúl.
La policía llegó al lugar alertada por la hermana del cantante, que sospechaba que este podría estar intentando quitarse la vida.
Kim fue llevado al Hospital Universitario de Konkuk donde se le intentó reanimar sin éxito y se certificó después su muerte.
La policía, en declaraciones recogidas por la agencia Yonhap, cree que falleció por inhalación de humo, ya que se encontraron briquetas de carbón en una sartén del piso.
Estas briquetas se utilizan en Corea del Sur para calentar casas con estufas antiguas y en restaurantes de barbacoa y son empleadas con frecuencia por personas que se quitan la vida en el país, que tiene una de las mayores tasas de suicidio de la OCDE.
La policía explicó que la hermana del cantante recibió un mensaje de él en su teléfono que decía: “Por favor déjame marchar. Dime que lo hice bien. Última despedida”.
La hermana relató que el pasado fin de semana Kim le había confesado que se encontraba muy deprimido y que además estaba pasando por una mala racha.
Kim debutó en mayo de 2008 como cantante principal de la formación SHINee, uno de los grupos masculinos de mayor renombre en el K-Pop, y a partir de ahí firmó una prolífica carrera también como solista y letrista, además de actuar puntualmente en cine y televisión.
El cantante acababa de actuar en solitario el 9 y 10 en Seúl y había grabado una actuación para un programa de la tv surcoreana que debía emitirse en Nochebuena. También tenía previstos conciertos con otros miembros de SHINee en febrero.