La youtuber Patricia Santaolalla " Caeli" subió a su cuenta de Twitter una carta en donde acusa a Google de fomentar el bullying , pues después de la filtración de un vídeo íntimo difundido sin su autorización, se puso en comunicación con una presunta empleada de la empresa quien vía WhatsApp le explica que no bajarán los contenidos de otro youtuber -a quien acusa de insultarla y difamarla- por el derecho al freedom of speech.
En una parte de la misiva la joven, que cuenta con más de 13 millones de suscriptores, escribió: “tienen que saber que en estos más de 7 años que he formado parte de Youtube/Google ...no me han ayudado a resolver ninguna situación que he tenido con ellos”, pues relata que la solución que le dieron fue "que lo contactara yo para hablar con él".
Caeli explicó: “el tipo que hizo ese vídeo sabe las reglas de Youtube y dice que no compartan aunque todo el mundo que no tiene 1 año de vida. Sabe lo que en realidad quiere decir. Saben que está incitando e inventando este tipo de cosas. Dice cosas no aptas para tener ese 'derecho de opinión' y aún asi! Aún así Google lo protege (sic)”.
La joven usó el hashtag #GoogleApoyaElBullying para difundir la supuesta respuesta de Google para bajar el contenido del autor, que sin mencionar su nombre, puede referirse a Diego "Mexivergas" quien fue de los youtubers que hizo mayor mención de la existencia del video, confirmando que ella era la protagonista. Aunque horas después, fue él mismo quien pidió no compartir el material y no vulnerar la intimidad de la afectada.
Ante la carta de Caeli, Diego respondió vía Twitter: “En lugar de tratar de emprender una triste campaña en contra de Google, Caeli debería emprender acciones contra la persona de la llamada de Skype que la grabó sin su consentimiento. Y Caeli sabe quién es esa persona, ya que se conocían íntimamente”.
No obstante, en su canal de YouTube, el también autodenominado "troll" ha subido todo tipo de videos en donde hace burlas y señalamientos a Caeli y otros youtubers. Incluso en 2015, llegó a distribuir y criticar unas fotografías de la joven en bikini en una pasarela, también sin su consentimiento.