Debido a la pandemia por el Covid-19, la segunda temporada de Falsa identidad tuvo que echar mano de pantalla verde para que los actores no se vieran y juntarlos en edición.
Las grabaciones, que se realizaron durante la contigencia sanitaria para cumplir con los tiempos de entrega, registraron algunos casos entre el elenco, que de inmediato fueron aislados
“En mi caso eran pruebas todos los días, ya no siento la nariz”, narra de buen humor Samadhi Zendejas, quien da vida a la antagónica de la producción.
“Yo fui de las contagiadas y la verdad fueron síntomas leves y había que cuidar a todo el equipo, había que proteger a todos”.
Antes de que llegara con fuerza el coronavirus al continente americano, Falsa identidad llevaba menos 20 capítulos grabados, faltando más de 80.
El serial, que lleva en los roles estelares a Luis Ernesto Franco y Camila Sodi, a los que se sumaron la exRBD, Dulce María y Marco de la O (El Chapo), muestra a dos personas cuyos mundos se entrecruzan y aceptan fingir un matrimonio feliz para huir de enemigos.
Los protocolos contemplaban que todos se “bañaran” con un atomizador antes de entrar al set, protección en camerinos y no dejaban que los actores se hablaran, más que en escena.
“Y es algo muy raro eso, estar con el otro actor a tres metros de distancia no es lo mismo; se necesita réplica para sentir a los compañeros en escena; a mí me ponían con una pantalla verde en la escenas como de acción y eso es un tema de imaginación, pensando cómo se va a ver, yo veía lo que habían hecho los demás y cómo estaban y entonces ver cómo le hacía, era muy raro”, relata.
Zamadhi protagonizó la serie Mariposa del barrio interpretando a Jenni Rivera en su juventud y en la segunda temporada de Falsa identidad, que estrenará en Netflix el mes próximo, mostrará a su personaje siendo quizá más duro que en la primera entrega.
“Podría decir que se enamoran de mi personaje y ahí comienzan todas nuestras historias”.