Luego de otros romances fallidos, Jennifer Lopez se casó con Marc Anthony en 2004. Si bien el matrimonio se disolvió en 2011, fruto de ese amor nacieron los mellizos Max y Emme. La vida de los artistas siempre fue agitada y su agenda estuvo llena de eventos, por eso no tuvieron más opciones que emprender la búsqueda de conseguir niñeras para la crianza de los pequeños.
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Pero la búsqueda de una niñera de parte de los cantantes se volvió algo complicada e incesante, producto de las renuncias sucesivas que presentaban las trabajadoras elegidas. “No puedes imaginar lo que es ser madre hasta que lo eres", dijo JLo en una oportunidad. Y es que con niños pequeños, la actriz tenía mucha demanda de atención de estos, pero también tenía obligaciones laborales.
Marc Anthony y Jennifer Lopez con sus hijos recién nacidos. Fuente: Instagram @brendariveranews
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“Normalmente, las personas que ganan grandes sumas de dinero y tienen muchas obligaciones profesionales y sociales contratan una niñera por cada hijo”, fue parte de la declaración que brindó alguien del círculo cercano a la cantante al medio National Enquirer. “ Jennifer optó por una sola [...] es como si esperara que una sola niñera, no sólo se ocupara de los dos gemelos, sino que trabajara 16 horas al día, ¡7 días a la semana!", también comentó la fuente.
Marc Anthony y JLo con sus hijos Emme y Max. Fuente: Instagram @brendariveranews
Lo que sucedió con la primera niñera, fue que renunció a la semana de haber empezado a cuidar a los mellizos y luego tuvieron que pensar en buscar una segunda cuidadora. Acerca de esta última, la fuente mencionó al mismo medio: “Era maravillosa, pero no podía soportar trabajar tantas horas sin descanso". Y luego la persona reveló que Marc Anthony y su esposa emprendieron nuevamente la búsqueda de la tercera niñera.
Actualmente, Emme y Max tienen 14 años y ya no requieren cuidados ni supervisión de una niñera. Pero cuando eran pequeños sufrieron el reemplazo muy seguido de esas personas que estaban pendientes de sus movimientos. Años más tarde, en 2017, JLo reconoció que en una oportunidad su hijo Max le pidió una cita a su madre, entre toda la agenda apretada que tenía de actividades.