Durante la primera semana de rodaje de “A cielo abierto”, la productora Eréndira Núñez Larios la pasó mal: le dio migraña por el clima del desierto, acabó en un camper con hielo y, cuando salió, se desmayó y tuvo que ser atendida por una ambulancia.
Por esos días, además de estar atendiendo la ópera prima de Mariana y Santiago Arriaga, hijos del escritor Guillermo Arriaga, debía estar atenta al rodaje de “Pet Shop Boys”, una cinta con Darío Yazbek y Willem Dafoe, que habían decidido trabajar algunos días en México, siendo ella la responsable de ese pequeño lapso.
"Cuando pasó lo del desmayo, Guillermo (Arriaga) se acercó y cambió todo: me dijo que debía tenerle mucho respeto al desierto; yo estaba tomando agua, pero me explicó que nunca me quitara los lentes de sol ni el sombrero.
"Eran días en los que no dormía sino hasta que llegaba la última unidad (de la filmación) sana y salva, se recorría hora y media hacia la locación y sabíamos había coyotes, muchas cosas", detalla.
Un año después, todo valió la pena. Eréndira comienza la cuenta regresiva para viajar al Festival Internacional de Cine de Venecia, que junto con Cannes y Berlín, son considerados los más importante del orbe.
En la ciudad italiana estarán tres películas en las que estuvo involucrada: las mencionadas A cielo abierto, una road movie que fue considerada en la sección Orizzonti y Pet Shop Boys, de Olmo Schnabel, que irá a Orizzonti Extra.
La tercera es “Memory”, protagonizada por la ganadora del Oscar, Jessica Chastain, bajo la dirección del mexicano Michel Franco ("Las hijas de Abril"), la cual fue peleará en la sección oficial por el León de Oro, máxima presea del certamen.
"Cuando las anunciaron me dormí hasta las cuatro de la mañana, estaba yo en mi cuarto y empecé a ver redes: primero salió las de los Arriaga, luego la de Olmo y después la de Michel. Me habló Olmo y luego los Arriaga, al día siguiente cuando llegué a la oficina, Michel me dijo que no había dormido nada, y así fue para todos", comenta.
Desde los 11 años de edad, Eréndira quiso ser productora de películas. Una de sus mejores amigas es hija de Martha Sosa, uno de los cerebros detrás de “Amores perros”, y quien de alguna manera la fue introduciendo al conocimiento del medio.
Un día, su papá le obsequió las películas de “Sunset boulevard” (1950) y “La rosa púrpura del Cairo” (1985) y fue el empujón definitivo, acompañado de unas palabras que se quedaron en su mente.
"Me dijo que tenía el carácter para ser productora: mandona, neurótica, organizada", cuenta divertida.
Eréndira, a sus 32 años, es de la nueva generación de productores mexicanos, en donde la tendencia femenina supera a la masculina.
"Me es difícil decir que me ha costado trabajo, que me les he visto igual que Mónica Lozano (‘No se aceptan devoluciones’), Bertha Navarro (‘El laberinto del fauno’) o la misma Martha, ellas marcaron un cambio en nuestra industria, pero eso no quita que tengamos ciertas complicaciones porque al final del día es nuestro país, sociedad e industria que puede ser machista. Creo que los hombres van cambiando, vamos avanzando", indica.
"Estamos viviendo un boom de mujeres en el cine, de directoras, productora, cinefotógrafas muy importantes. Uno ve las nominaciones al Ariel y ahí están", considera.
Luego de Venecia, Eréndira comenzará la promoción de Heroico, película dirigida por David Zonana y que aborda la violencia que se padece en el colegio militar mexicano.